La continuidad de Guido Rodríguez, como hace un año, ha sido decisión propia. Si el verano pasado estuvo cerca de aceptar una propuesta importante del Everton que, seguramente, habría terminado satisfaciendo las exigencias del Real Betis, en esta ocasión ha dejado pasar dos subidas de sueldo importantes en Lyon y Nottingham. Aquella vez, su apuesta por el proyecto verdiblanco, que rozó durante meses la Champions y culminó con la tercera clasificación consecutiva para la Europa League, pesaron más en la determinación del campeón del Mundo, que buscaba, a la vez, estabilidad a las puertas del Qatar 2022. Ahora, aparte de lo a gusto y valorado que se siente en Heliópolis, el embarazo de su mujer, Guadalupe, y el deseo de no alterar demasiado las rutinas de la familia en unos meses tan importantes le hicieron rechazar sendas salidas jugosas en lo monetario, una de ellas con el beneplácito del dueño de sus derechos hasta 2024.
Precisamente la inminencia del final de la vinculación entre ambas partes urge a los responsables hispalenses. El rendimiento del de Sáenz Peña ha elevado su tasación en el mercado hasta casi los 30 millones de euros, por lo que sería un pecado mortal dejarle ir gratis el ejercicio venidero, pudiendo negociar libremente, con una buena prima de fichaje añadida, desde Año Nuevo. Por eso, en la planta noble del Benito Villamarín (con sólo el 70% del pase en su poder) se conforman con recaudar la mitad por su traspaso, habida cuenta de que, por ahora, no hay acuerdo para la ampliación hasta 2025 o 2026. 'Deportes Cope' avanzaba este viernes que se brindará a Guido situarse en el primer escalón salarial junto a Fekir, si bien ESTADIO Deportivo ha podido confirmar que las intenciones en el Betis pasan, como ya se apuntó, por mejorar sensiblemente el montante rechazado semanas atrás para que el '5' estuviera en el listón de William Carvalho (2,5), con la citada cláusula de salida en julio del año que viene.
Así las cosas, el canterano de River Plate obtendría una mejora sustanciosa para este curso, con el compromiso de aceptar durante la primera mitad del mercado estival más cercano una venta en condiciones más ventajosas para sus pretendientes (se habla de 10 kilos), manteniendo la rescisión unilateral en 80 a partir del 1 de agosto, siempre negociables a la baja. Por ahora, la familia Sabbag, asesores del centrocampista a lo largo y ancho de su carrera, no ha trasladado una respuesta negativa o afirmativa a esa actualización de las condiciones, la última para esta redacción. Guido desea centrarse estas dos semanas en la concentración de la Albiceleste, que disputa ya las Eliminatorias de clasificación para el Mundial de 2026, donde defenderá título. Como su compañero Pezzella, se quedó sin minutos en el triunfo por la mínima (1-0, con gol de Messi) frente a Ecuador, aunque tendrá una nueva oportunidad el próximo martes en Bolivia.
Sí parece descartado que vaya a haber cambios radicales este mes, con varios mercados pudientes abiertos, puesto que el jueves cerró el saudí, aunque no lo hicieron en Grecia (hasta el 11-S), México (13-S) o Turquía (15-S), con el Fenerbahçe filtrando que desde Heliópolis piden 13 kilos por el traspaso del medio italo-argentino. Con el siguiente paso en su carrera todavía por determinar, todo hace indicar seguirá, salvo giro radical de los acontecimientos, al menos hasta enero, donde Forest y Barça podrían volver a la carga a por él. La azulgrana sería la única tentación que le haría dudar, aunque fuentes cercanas al interesado apuestan por que abrochará la 23/24 vestido de verdiblanco y, renovado o no, cualquier cambio de aires se pospondría hasta verano, especialmente por la citada situación familiar que, como adelantó su esposa, Guadalupe, altera el guion y las prioridades de la familia Rodríguez Ramón.