El entrenador del Real Betis, Manuel Pellegrini, decidió correr los mínimos riesgos posibles a la hora de confeccionar su alineación titular en el choque de este pasado jueves en el que goleó por 4-1 al Aris Limassol y dejó bastante encarrilado su pase a la siguiente fase de la UEFA Europa League como líder del Grupo C. No obstante, el destino es caprichoso: el chileno hizo ocho cambios en el once ante los chipriotas pero se le lesionaron dos de los tres únicos fijos para salir de inicio en El Gran Derbi del domingo ante el Sevilla FC en el Ramón Sánchez-Pizjuán: Germán Pezzella, que ha calmado las aguas tras el susto, y sobre todo Claudio Bravo, cuyas pruebas médicas han confirmado los malos pronósticos.
Mientras el Sevilla FC pasa por horas complejas, como prueban las caras largas de la expedición que viajó a Londres, el Betis va lanzado al derbi: suma siete victorias y cuatro empates en los últimos 11 encuentros oficiales entre todas las competiciones. El juego de los verdiblancos era bueno y sólo le estaba costando ver portería en este arranque de curso, pero ahora viene de marcar 20 tantos a favor en las cuatro últimas citas (12 fueron al Hernán Cortés). Así, lo único que hace torcer el gesto en La Palmera son los partes médicos, pues ha sumado cuatro lesiones en cinco días. Tampoco los nervionenses están mucho mejor, con Sergio Ramos casi descartado, con Marcos Acuña y Soumaré siendo serias dudas hasta última hora y con Orjan Nyland como baja confirmada.
Al menos, dentro de la espiral de malas noticias en forma de lesiones, el Betis puede respirar con Germán Pezzella. El central campeón del mundo pidió el cambio ante el Aris Limassol por unas molestias físicas y, ante la excesiva carga de minutos que lleva obligado por las circunstancias, hizo que todos temiesen lo peor. El primer gesto tranquilizador fue el mensaje que el '6' dejó al oído de Pellegrini, al que siguió una reveladora sonrisa antes de sentarse en el banquillo. "Germán ya venía con alguna molestia durante la semana pero creo que le sacamos justo antes de que se hubiera agrandado la molestia", decía el míster. Luego, el zaguero habló en redes sociales y despejó la preocupacion prometiendo que estará contra el Sevilla FC: "Todo bien, preparado para lo que viene".
La mayor preocupación ahora mismo en el Real Betis se centra en la portería, ya que el miércoles se daba a conocer que Rui Silva sufría una dolencia muscular en los isquiotibiales y será baja como mínimo hasta después de este parón de noviembre. La ausencia del luso la agravó Claudio Bravo, que este jueves tuvo que ser atendido sobre el césped por un pinchazo en la zona posterior del muslo izquierdo. Su aparatoso vendaje compresivo y su rostro de abatimiento en el círculo central tras el choque con el Aris eran indicativos claros de que no era poca cosa. El meta chileno mostraba una cara muy seria y hacía gestos de negación mientras Pellegrini y sus compañeros, uno a uno, se acercaban para preguntarle por sus sensaciones, le abrazaban y le daban ánimos.
"Muy probablemente será algo serio", decía anoche el técnico del Betis a falta de los resultados de las primeras pruebas médicas, que en la mañana de este viernes han confirmado los malos pronósticos. Bravo sufre rotura muscular (entre mes y medio y dos meses de baja) y el derbi lo tendrá que jugar Fran Vieites. El portero del filial ya tuvo media hora ante el Barça en la que no estuvo bien y ahora podrá resacirse. Es curioso que los dos porteros se hayan lesionado dos veces cada uno y que ambas convalencencias se hayan producido de manera simultánea. Este hecho aumenta los rumores tras la reciente reunión entre dirigentes heliopolitanos y David de Gea, que está libre y podría firmar como ya lo hizo un Sokratis Papastathopoulos que pinta a que debutará en el derbi.
Tras la recuperación de Nabil Fekir, que disputó sus primeros minutos ante el RCD Mallorca y repitió este jueves ante el Aris, a principios de esta semana el Betis sólo tenía en la enfermería a Marc Bartra, que fue operado de una lesión parcial en el tendón de Aquiles por la que estará de baja hasta finales de 2023. La óptima situación se empezó a torcer el lunes, cuando el club comunicó que Youssouf Sabaly había sufrido un esguince de rodilla que le tendrá parado también hasta bien entrado el mes de diciembre, justo cuando estaba a punto de volver de la lesión en el aductor que sufrió en el parón de septiembre. Tanto el catalán como el senegalés, evidentemente, son bajas confirmadas.