Fernando Ruiz3 min lectura"Bartra es un torrente de energía, es una cosa... estaba desesperado, llamaba todos los días. Se fue porque le daban un buen contrato, pasa como en Arabia Saudí, la diferencia es muy grande pero cuando estás allí ves todo lo que has perdido. Quería volver, yo le tranquilizaba, Manuel Pellegrini nos dijo que sí enseguida, pues la temporada es muy larga y nos va a dar muchas cosas". Esto decía anoche el director deportivo del Real Betis, Ramón Planes, sobre un impaciente Marc Bartra que tan sólo quería regresar al Real Betis apenas un año después de marcharse al Trabzonspor turco.
Y esas ganas por volver las puso ver todo el beticismo el pasado sábado, cuando por regresaba al césped Benito Villamarín en la previa de un partido de fútbol tras no poder hacerlo en la jornada 2 frente al Atlético de Madrid, ya que por entonces no había podido ser inscrito en LaLiga. Marc Bartra finalmente no tuvo minutos y vio todo el encuentro desde el banquillo, pero eso fue lo de menos después de un largo año lejos del Benito Villamarín porque lo que vivió el central catalán en los minutos previos al encuentro le tocó el corazón, es algo sentimental y eso va mucho más allá.
El central verdiblanco pudo volver a sentir el calor de la afición bética, de una grada a rebosar que no paró de animar a su equipo desde antes del comienzo del partido. Fue ahí, segundos antes de que los once jugadores del Real Betis y los once del Rayo Vallecano saltaran al terreno de juego, cuando comenzó a sonar el himno verdiblanco por la megafonía del estadio y la grada, como es habitual, comenzó a cantarlo a capela.
En el vídeo captado por las cámaras de 'El día después' de Movistar+ se puede ver como .el propio futbolista también se anima a entonar el himno, el cual ni mucho menos ha olvidado, moviendo sus labios y poco a poco la emoción le va embargando, haciéndole imposible reprimir una sonrisa de felicidad y confesándole a su compañero Altimira, sentado a su lado, que se le han puesto los vellos de punta señalándose el brazo.
El central del Betis todavía no ha tenido la oportunidad de debutar en su segunda etapa en el club verdiblanco, pero a buen seguro que será más pronto que tarde, y entonces podrá volver a vivir un partido desde dentro del rectángulo de juego.