La compra de Willian José, investigada por la FIFA

La relación entre Willian José y el CD Maldonado, histórico club uruguayo que ejerce de 'testaferro' de un fondo de inversión, se remonta a 2011, cuando tenía 19 años y descollaba en el modesto Barueri brasileño. Unos meses antes, a finales de 2009, el multimillonario inglés Malcolm Caine, vinculado a los caballos de carreras, se asociaba con el intermediario de jugadores Jonathan Barnett (fundador del Stellar Group, ahora delegado en su hijo Joshua tras su reciente jubilación) para comprar a esta sociedad al borde de la desaparición y el descenso a la tercera división del país. Pero no para reflotarla (aunque, al menos, lleva cinco años en la máxima categoría), sino para utilizarla como pantalla o intermediario, aprovechando que, a ojos de la FIFA, la nación charrúa es poco menos que un paraíso fiscal en el que ahorrarse millones de euros en impuestos. Desde entonces, los fernandinos compraron y vendieron docenas de jugadores que nunca se pusieron su camiseta.

Jonathan Calleri, Gerónimo Rulli, Iván Piris, Allan Marques, Marcelo Estigarribia o Alex Sandro fueron dejando teóricas plusvalías en una institución que, en realidad, se beneficiaba de otra manera (nóminas del personal, formación e infraestructuras), aunque no con estos profesionales de primer nivel. Ahora, la máxima autoridad del fútbol mundial está investigando la venta de Willian José al Real Betis, realizada en diferido, pues, en primer lugar, la Real Sociedad cedía al delantero en el verano de 2021 por una cantidad oficiosa de 1,5 millones de euros (según las cuentas donostiarras, pudo ser el doble), con una opción de compra de 8,5 que se convertía en obligación según unos parámetros de rendimiento, informaban a ESTADIO Deportivo en su día fuentes de la operación, "de muy fácil cumplimiento". De hecho, aunque no precisaron, se hablaba de 10 partidos oficiales y un gol como condicionantes.

Sea como fuere, a efectos de 'Fair Play Financiero', LaLiga, la UEFA y la FIFA consideraron el trato como dos movimientos diferentes, aunque el PSG reclamó a los verdiblancos 2,6 kilos más intereses (3,5 en total) por un caso parecido, el préstamo en 2019 al Tottenham de Lo Celso a cambio de 16 millones, sin ninguna exigencia esta vez de pagar otros 32, que, obviamente, sí terminaron desembolsando los ingleses por tratarse de una venta encubierta a plazos, argumentaron los parisinos, que ganaron en primera instancia, aunque perdieron en el TAS, como el Nápoles, que quiso ahorrarse 1,5 kilos del mecanismo de solidaridad por Fabián. Ahora, la exigencia del Maldonado es a la Real, no al Betis. En concreto, según las cuentas anuales del club 'txuri-urdin', en su apartado del segundo semestre de 2023 (Nota 12: Provisiones y contingencias. Activos y Pasivos contingentes), los uruguayos exigen algo más de 1,7 kilos, desvela 'Mundo Deportivo'.

"Existen discrepancias con el CD Maldonado en relación a la liquidación de los derechos económicos derivados del traspaso del jugador Willian José que tuvo lugar en 2021. El club reclama un importe de 1.752.480€ por aplicar el 30% que le corresponde en la operación sobre determinados conceptos (cesión temporal, compensación de gastos e impuestos) sobre los que la SAD entiende que, según los términos del acuerdo alcanzado, no generan derecho a la mencionada liquidación. Se ha procedido por parte del CD Maldonado a la reclamación formal ante la FIFA de dicha cuantía, habiéndose presentado la documentación y contestaciones oportunas por parte de la SAD. El procedimiento se encuentra pendiente de resolución a la fecha actual, si bien en opinión de los asesores legales no es probable que la misma resulte desfavorable para la Sociedad, por lo que no se ha provisionado importe alguno", señala el dossier realista.