El Betis sufrió un fuerte varapalo con Isco cuando el futbolista verdiblanco se tuvo que operar por segunda vez de la fractura del peroné izquierdo que sufrió al final de la temporada pasada. Isco tuvo que pasar por el quirófano, de nuevo, para reforzar la zona dañada la cual no estaba yendo según los planes previstos. Intervenido en septiembre, esto ha aplazado aún más el regreso de Isco a los terrenos de juego, el cual se espera para comienzos del año 2025. Isco trabaja en silencio para cumplir esos plazos y sus compañeros no le pierden de vista como ha desvelado Sergi Altimira, centrocampista del Betis, quien ha dicho que Isco está transmitiendo buenas señales.
Sergi Altimira ha hablado un poco de Isco en una entrevista que ha concedido en este miércoles 15 de octubre, en donde ha indicado que el malagueño se siente optimista y que transmite alegría también con su sonrisa cuando coinciden en las zonas comunes del entrenamientos.
"Bueno al final Isco ya sabemos el jugador que es y al final los mejores jugadores que tenemos siempre queremos que jueguen en el campo... pero bueno, le deseo pues... tengo muy buena relación con él y creo que lo necesitamos, tanto a él como a todos, y ya está. Bueno la verdad que él está muy optimista después del bache que tuvo con la segunda operación... está muy optimista, lo vemos siempre como una sonrisa, que esto al final se transmite y bueno yo creo que está en buen camino para volver lo más pronto posible", ha explicado Sergi Altimira sobre su compañero Isco en una entrevista concedida a los compañeros de Onda Cero Sevilla.
Isco, ahora mismo, se encuentra alejado de los terrenos de juego desde el pasado mes de mayo cuando en uno de los últimos partidos de la pasada temporada Saúl Coco, por entonces en Las Palmas, le dio una patada que le provocó una rotura del peroné de su pierna izquierda. En principio, su recuperación estaba prevista para comienzos de la actual campaña pero la recuperación de Isco no fue como estaba planeada y se tuvo que volver a operar del peroné, reiniciando su proceso de recuperación.
Isco ahora trabaja en silencio, alejado del ruido mediático, aunque la última vez que apareció de manera pública fue en los medios oficiales del club bético para mostrar sus ganas de poder ayudar en esta temporada al Betis entrenado por Manuel Pellegrini. "El equipo me está poniendo cachondo perdido", aseguró entre risas Isco que, a sus 32 años, está pasando por uno de los momentos más difíciles de su carrera deportiva por culpa de esta lesión.