Fernando Mateos4 min lecturaLa cantera ha sido la gran tabla de salvación económica del Real Betis en este ejercicio. Tras la última junta general de accionistas, el presidente verdiblanco, Ángel Haro, reconocía la necesidad de generar plusvalías mediante traspasos para cuadrar las cuentas, siendo 20 millones de euros la cantidad fijada en este sentido. Un objetivo ya alcanzado gracias fundamentalmente a las ventas de Rodri, que puso rumbo a Qatar con la temporada ya en marcha a cambio de 8 millones de euros, y Assane Diao, transferido en este mercado de enero al Como por 11,5 millones, conservando el club de Heliópolis el 20% de su pase.
No cabe duda de que en La Palmera están sabiendo rentabilizar a nivel financiero la acertada política que se lleva a cabo en los escalafones inferiores. Así, al margen de esos dos grandes traspasos firmados en apenas unos meses, también se ingresó en verano 1,2 millones por Rober González y otro kilo por Juan Cruz, conservando además en ambos casos el 40% de sus derechos, lo que puede seguir elevando las ganancias con ambos.
Junto a ellos, otra fuente de posible negocio tiene como protagonista a Álex Pérez, que puso rumbo al Inter de Milán, en su caso como cedido. Tras unas duras negociaciones, pues entraba en su último año de contrato, el prometedor central de sólo 18 años renovó por dos campañas más, hasta 2027, y acabó marchándose a préstamo al conjunto italiano, que se reservó una opción de compra de 700.000 euros, guardándose el Real Betis el 10% sobre la plusvalía de una futura venta.
Sin embargo, la andadura del madrileño en la capital lombarda no ha ido como se esperaba por culpa de las lesiones. Tras destacar en el Juvenil A y debutar con el Betis Deportivo el pasado enero, el ex del Rayo Vallecano tuvo que parar en marzo por una importante lesión muscular de la que no estaba plenamente recuperado cuando se formalizó su salida. Por ello, el Inter quería testarlo antes de apostar de verdad por él, si bien hasta la fecha apenas ha podido hacerlo por sus problemas físicos.
Álex Pérez aterrizó tocado en Milán y no pudo debutar hasta el 14 de septiembre. Fue en un choque con el equipo Primavera ante el Cagliari, disponiendo de poco más de media hora que le sirvió para dejar una buena imagen. Pero enseguida volvió a recaer y no reapareció hasta el 15 de diciembre, esta vez con el conjunto sub 18 del Inter, y curiosamente de nuevo ante el Cagliari, disputando la primera mitad del choque. Fue apenas un rayo de esperanza, pues ha habido que esperar un mes y medio para verlo de nuevo en acción.
A lo largo del mes de enero ya había sido convocado en tres ocasiones por el Primavera 'nerazzurro' sin llegar a salir del banquillo, pero hace algo más de una semana ya se probó en un amistoso y ha sido este pasado sábado cuando ha vuelto al fin al jugar, disputando los 18 últimos minutos de la derrota de su equipo ante el Torino (3-0). Ahora todos cruzan los dedos para que esta reaparición sea la definitiva, tanto en el Inter, que desea evaluarlo de aquí a final de temporada para tomar una decisión con respecto a su futuro, como en el Betis, donde en cualquier caso interesa que el futbolista se revalorice en una cantera de primer nivel.