"Si no estoy yo estará Rui y, si no, Dani. La posición está más que cubierta", indicaba este verano Claudio Bravo cuando le preguntaron, antes del arranque, por la posibilidad de no poder ser inscrito por el Real Betis en la primera jornada de LaLiga. Finalmente, fueron tres las que se perdió, pero, como cuando hizo estas declaraciones, no se mostró nervioso. Tenía claro que quería quedarse en el Betis y ni siquiera cantos de sirena como los del Girona en los últimos días le podían convencer.
“Nunca me vi fuera del equipo. Rechacé ofertas porque yo y mi familia estamos muy cómodos aquí. Hubo un par de ofertas, pero las desechamos. La familia es muy importante para mí y está feliz aquí", asegura el meta chileno en Canal Sur, donde admite que sí sufrió en ese tiempo, pero más por no poder ayudar al equipo. "Lo pasé mal por cuanto uno quiere entrenar y jugar, pero tenía la confianza en el club de que se iba a solucionar", añadía.
De hecho, aunque al veterano guardameta bético se le ve el próximo año de regreso en su Colo Colo querido y en Chile, no parece pensar lo mismo a tenor de sus declaraciones. "Me mantiene vivo ver el estadio lleno y la presión que te da ver a la afición", aseguraba Claudio Bravo antes de añadir que su idea es seguir más allá de junio: "Tengo la mente puesta aquí y estaría feliz si me quedo. Estamos muy cómodos. Es un buen club, y un vestuario y un cuerpo técnico increíbles. Y también está el plano familiar. Eso es lo que me mantiene activo. Si es aquí, seguiré y ya se verá si es posible. Tuve la posibilidad de salir. O me quedaba aquí o se acababa mi carrera, pero es más difícil seguir si no es así. Tengo otras opciones más allá del fútbol", afirmaba.
Y, en este sentido, respaldaba otra renovación, como la suya, en la que ha sido clave el peso que tienen en el vestuario. "Los vestuarios necesitan gente grande como Joaquín. Hay cosas que no se compran en una farmacia. Los demás te siguen", admitía.
Tal vez le falte jugar más -sólo lo ha hecho en Europa League-, pero el ex del Manchester City tiene claro que las rotaciones de Pellegrini ayudan a mejorar el equipo. "Nosotros nunca sabemos previamente si vamos a jugar. Los dos trabajamos para jugar y la competencia nos ayuda a los dos", indicaba Bravo, quien mantiene una gran relación con Rui Silva.
De lo que está más contento es de vivir este arranque, que tiene al Betis junto a los dos poderosos del fútbol español y mundial. "Había la idea de acumular muchos puntos en este inicio, porque hemos mantenido casi todo el plantel y nos hemos reforzado bien. Tenemos que seguir aspirando a mayores premios. Queremos llegar a lo más alto", añadía Bravo, quien tiene claro que el Betis tiene "un gran equipo para seguir haciendo las cosas bien” en los próximos meses.