Había sido profeta en todos los lugares menos en su propia tierra, donde después de hincharse a marcar en el Celta B (75 en 146 partidos) se consolidó como goleador en Segunda división con el Real Zaragoza (21 dianas en 43 encuentros) y en Primera con el RCD Espanyol (23 en 46) y en el Real Betis (52 en 181). Al gallego Borja Iglesias le faltaba celebrar tantos en LaLiga con la camiseta del primer equipo celeste. De momento suma cinco en 24 citas, pero confía en que sean muchísimas más. En este sentido, asegura tener muy claro que su decisión de volver a casa va mucho más allá del año de cesión que tiene firmado hasta el próximo 30 de junio de 2025. El 'Panda' sabe que no será sencillo, pero este viernes ha vuelto a mandar un mensaje hacia Heliópolis: su deseo es continuar en Vigo, por fin cerca de su familia -vive en su Santiago natal y se desplaza a diario-, y siente que la idea de la entidad es la misma.
"La verdad es que estoy muy feliz aquí. A día de hoy (el futuro) es algo en lo que intento no centrarme mucho. Intento disfrutar del momento, seguir aportando y aprendiendo desde aquí. Pero, a día de hoy, estoy aquí, y me imagino aquí", ha asegurado Borja Iglesias en una entrevista concedida al programa 'En Xogo' de la Televisión de Galicia. "Ojalá", ha enfatizado al ser cuestionado por las posibilidades de quedarse en el Celta. Sabe que no será sencillo, pero confía en que el club vigués pueda ponerse de acuerdo con el Betis en el aspecto económico. Sobre todo, teniendo en cuenta que entraría en su último año de contrato y es de conocimiento público que no entra en los planes de un Manuel Pellegrini que esta misma semana era ratificado en el cargo y que sigue insistiendo en su intención de seguir al menos hasta el final de la 25/26.
Con el tema de la duración de su contrato hubo cierto revuelo por una controversia para nada baladí a la hora de hacer esas cuentas por su hipotético traspaso al Celta. Y es que, mientras en el Betis daban por evidente el hecho de que antes de su cesión se había activado la cláusula para extender un año más su contrato, hasta 2027, desde la agencia del delantero explicaron en su día a ESTADIO Deportivo que esa prórroga no fue notificada en tiempo y forma, por lo que queda libre en 2026. A los 1,8 millones de euros netos que percibe como ficha, al club verdiblanco le quedarían aún cuatro millones de euros de amortización pendiente en su fichaje, por lo que cabe entender que no accedería a vender al Panda por menos de esos casi seis millones.
Borja Iglesias no sólo da por acabada su etapa de verdiblanco y atisba un futuro celeste. Además, también da forma a una ilusión 'Roja'. Hace año y medio realizó un recordado anuncio de renuncia a ser convocado por la selección española en solidaridad con Jenny Hermoso y en señal de protesta tras los escándalos que acabaron con la etapa de Luis Rubiales al frente de la RFEF. Ahora, con el gallego Rafael Louzán al frente, el de Santiago de Compostela se abre a volver a defender la camiseta de España.
"Creo que estamos en otro momento. Espero que sigamos dando pasos hacia delante, que creo que poco a poco se está haciendo. Animar a que lo sigan haciendo. Desde esa posición ayuda mucho cuando se toman decisiones de este estilo. Animarlos a hacer eso y ya veremos qué pasa en el futuro", opinó Borja, quien obviamente es consciente de que no será nada fácil convencer a Luis de la Fuente. Ganarse un puesto está carísimo: "Lo principal para volver es hacerlo muy bien. Marcar muchos goles y que el equipo esté bien, porque eso siempre ayuda a estar. Y luego, que decidan que puedo estar".