Borja desvela los comentarios del banquillo del Betis al ver a Joaquín

"Me he visto demasiado bien", señalaba Joaquín Sánchez al término del partido amistoso que el Real Betis empató contra el FC Inter de Milán (1-1). No le faltaba razón al capitán, que dejó con la boca abierta a propios y extraños. Lo normal, tras estar 51 días sin jugar, es ir recuperando el ritmo poco a poco; sobre todo si, como es el caso, cuentas 41 primaveras. Sin embargo, el portuense ha vuelto enchufado y no sólo asombró a los jugadores 'neroazzurri' -algunos, los más veteranos, le conocían de su etapa en la Fiorentina-, sino también a sus propios compañeros, como reconoció Borja Iglesias.

Borja pasó por la zona mixta del Benito Villamarín y, al ser preguntado por el buen partido de Joaquín, contestó explicando el debate que el veterano capitán generó en el banquillo nada más salir. Cuando el partido se apagaba en una maraña de cambios, el '17' empezó a hacer lo que nadie se había atrevido: encarar, desbordar y centrar. Así llegó el gol de otro iluminado como Juanmi Jiménez, que marcó su primer tanto después de casi cuatro meses de lesión.

"¿Cuántas veces le hemos visto hacer esa jugada? Lo estábamos hablando en el banquillo Andrés (Guardado) y yo. 'Joaquín tiene una gran facilidad para sacarse a jugadores de encima y poner buenos centros'. El balón va muy bien puesto, Juanmi ataca muy bien el balón y la pica abajo. Los dos lo han hecho muy bien", ha manifestado el 'Panda'.

"Un lujo para el Betis"

"Que esté con nosotros ya es una alegría y si está con nosotros marcará muchos goles porque es muy bueno. Estoy contento por él, al final las lesiones son procesos duros que vives solo gran parte del tiempo y tenerlo entre nosotros es lujo, como lo será cuándo vuelvan los compañeros que están tocados ahora", añadió Borja Iglesias sobre su amigo Juanmi Jiménez.

"Nos vamos contentos porque son estos partidos (ante equipos fuertes) son útiles ya que te preparan para volver a la competición. El equipo está rindiendo como lo estaba haciendo antes de irnos y con ganas de que llegue de nuevo lo bueno", ha analizado el delantero del Betis que asegura que el equipo se conjuró a la vuelta de las vacaciones, a las que llegó algo justos de fuerzas.

"Después de las vacaciones había que volver a la puesta a punto. Este año es un poco extraño porque te pilla entre medias. El equipo está trabajando bien, con ganas, y con muchas ganas de hacer una segunda parte de la temporada buena. Todos tenemos ganas de lo bueno, de la rutina, de lo bueno y tenemos un 2023 apasionante", señaló con vistas al último partido del año, el próximo día 29 ante el Athletic Club en el Benito Villamarín. Pero antes de eso, toca medirse el día 23 al Atalanta, también al calor de su gente.