El Real Betis le ha abierto la puerta de salida a Luiz Henrique, un globo que se hinchó y ganó altura nada más llegar a Heliópolis, cuando había consenso en tener paciencia con él y esperar a una adaptación que daba la sensación de no necesitar, pero que ahora lleva desinflado mucho tiempo. Demasiado. Lo suficiente como para que el club verdiblanco le ponga en el mercado y para que en Brasil proliferen en estos días noticias que apuntan a un posible regreso del extremo a su país. Según han anunciado en las últimas horas varios periodistas cariocas, el CR Flamengo ha mostrado su interés en hacerse con una cesión del '11' verdiblanco, aunque la primera opción en Heliópolis sería la de hacer caja con un traspaso.
Así lo apunta este viernes una información de Relevo, que se hace eco de las informaciones acerca del movimiento del Flamengo para conseguir su cesión y la amplían con la que habría sido la respuesta por parte del Betis: traspaso con plusvalía o nada. Cabe recordar que el verano pasado Luiz Henrique era una de las principales esperanzas de hacer caja y que, de haber cristalizado el tan cacareado interés del Zenit, el único que pujó de manera formal, la Juventus, el Nápoles o el Aston Villa, muy posiblemente a día de hoy su compatriota Luiz Felipe seguiría formando tándem defensivo con Germán Pezzella.
Los postores no llegaron entonces a lo que pedía Ramón Planes y, para colmo, una lesión muscular nada más arrancar la que debía ser la temporada de su consolidación y el inoportuno escándalo de un caso de apuestas deportivas fraudulentas. Ya está libre de toda sospecha, aunque el daño ahí quedó, pues la amenaza de graves sanciones frustró la hoja de ruta diseñada por el Betis en un puesto (el de extremo) donde hay un 'overbooking' que contrasta de manera llamativa con el déficit existente en otras posiciones como el centro de la defensa o el pivote defensivo. La situación ha cambiado de manera radical, pues a día de hoy los pretendientes europeos dispuestos (en teoría) a romper la hucha han dejado paso a meras propuestas para volver a Brasil a préstamo y en pleno parón liguero en su país.
Por eso, aunque desde el principio el Betis admitió que el de Luiz Henrique era un fichaje destinado a generar rendimiento y plusvalía a corto-medio plazo, en principio el club sólo se plantearía en el mercado invernal una salida que ofrezca una rentabilidad que le permita equilibrar sus cuentas financieras y poder reinvertir en darle a Pellegrini el equilibrio que no tiene una plantilla mermada por la lucrativa pero extemporánea venta de Luiz Felipe al Al-Ittihad saudí; situación agravada luego con lesiones estratégicas como las de Marc Bartra o Guido Rodríguez y con la inminente Copa de África como hándicap añadido.
Ez Abde se irá con Marruecos con total seguridad, cada día hay más posibilidades de que le acompañe Chadi Riad y Senegal insiste para llevarse a Youssouf Sabaly a pesar de que el lateral derecho aún no tiene el alta médica tras lesionarse del aductor en septiembre, en un partido precisamente con su selección, que encadenó con un posterior esguince de rodilla en un entrenamiento cuando ya estaba a punto de volver de su primera dolencia.
El rendimiento de Luiz Henrique, lejos de ir a más, ha caído en picado desde aquella descollante actuación en la Supercopa de España disputada en Arabia Saudí hace poco menos de un año, en enero de 2023. Su rendimiento va a menos y ese línea descendente es proporcional al grado de confianza de Pellegrini, quien a día de hoy cuenta con Ayoze, Abde, Assane y Rodri por delante del brasileño. Incluso Isco y Fekir, uno de los dos, cuando el francés por fin se recupere del todo. En ese puesto, además, saldrá en breve Juan Cruz, que renovará hasta 2027 para poder salir cedido y buscar los minutos que se le están resistiendo esta 23/24 en un Betis que ha perdido la confianza en ese prometedor futbolista al que le puso una cláusula de rescisión de 100 millones de euros y un contrato hasta 2028 para blindarle nada más ficharle del Fluminense.