Álvaro Palomo3 min lecturaAhora mismo el beticismo se encuentra en tensión por el estado físico de Isco Alarcón tras retirarse lesionado en el partido del pasado domingo contra el Getafe en el Benito Villamarín. El centrocamposta verdiblanco fue sustituido con visibles gestos de dolor y de forma inmediata saltaron las alarmas en el seno de la entidad, al tratarse de un futbolista determinante.
El propio Pellegrini se refirió tras el partido a este duro contratiempo y prácticamente descartó al malagueño para la próxima cita liguera contra el Cádiz en el Nuevo Mirandilla a la espera de conocer exactamente el alcance de la lesión tras someterse a las pruebas pertinentes.
"Isco sintió una molestia muscular. Veremos si es contractura solamente o un desgarro. Abner tiene una lesión en el tobillo. Veremos mañana (por hoy) en ambos casos, pero no creo que sea muy corta. En principio no veo ninguno de los lesionados que pueda estar para el Nuevo Mirandilla. Será más o menos el mismo plantel que ha terminado el choque ante el Getafe", señaló el preparador verdiblanco, que no se mostró en absoluto optimista en relación al estado de Isco.
Así las cosas, todas las miradas estaban pendientes del entrenamiento de esta mañana en la ciudad deportiva verdiblanca por si Isco hacía acto de presencia, lo que, obviamente, era muy poco probable después de como abandonó anoche el Benito Villamarín.
Como era de esperar, Isco se ha ausentado en la primera sesión de la semana y todo apunta a que la cita contra el Cádiz será la primera que se pierda por lesión desde que viste la elástica verdiblanca, pues el malagueño ha participado en todos los encuentros hasta la fecha a excepción del choque contra el Girona de la jornada 18, en el que no estuvo por sanción.
En el capítulo de buenas noticias, Chimy Ávila trabajó por primera vez con el resto del grupo desde su aterrizaje, pues la semana pasada se entrenó en solitario tras dejar atrás la lesión que arrastraba en Osasuna. Igualmente, Pellegrini también tuvo a sus órdenes a Marc Roca y Claudio Bravo, que vuelven al grupo una vez recuperados de las molestias que le han mantenido alejados de los terrenos de juego.
Poco a poco, la enfermería se va vaciando, si bien ahora tendrá nuevos inquilinos con el ingreso de Abner e Isco una vez que se sepa con exactitud qué tipo de lesiones sufren. Máxima tensión en el Benito Villamarín.