El futuro de William Carvalho, seguramente muy a su pesar, es el pan nuestro de cada ventana de transferencias, incluso aunque éstas no se hayan abierto oficialmente. No es ningún secreto que el Real Betis necesita reactivar los ingresos extraordinarios vía traspasos, que antes de la pandemia sustentaban el crecimiento de la institución y que quedaron cercenados por la crisis económica derivada de la sanitaria, pero tampoco extraña a nadie que el deseo de no malvender a ninguno de sus pilares prevalece sobre los cierres de ejercicios fiscales y otros conceptos. Además, hasta la fecha, Manuel Pellegrini ha frenado cualquier opción de salida del mediocentro, que tampoco ha puesto de su parte para abandonar Heliópolis cuando no fue incuestionable, por lo que tendría poco sentido que lo hiciera ahora.
Desde Turquía, aprovechando que su gran valedor y mentor, Jorge Jesús, ha desembarcado en el Fenerbahce, se insiste desde hace semanas en que el internacional portugués acabará cambiando LaLiga por la Süperlig. Aunque ya lo quiso el veterano preparador para el Benfica y se quedó con las ganas, la prensa otomana defendía una segunda ofensiva de los aurinegros ante la irrupción en escena de su eterno rival, el Galatasaray, una subasta que, por supuesto, convenía en la planta noble del Benito Villamarín por la posibilidad de que el 'producto' se encareciese. No obstante, como quiera que el jugador nacido en Angola acaba contrato dentro de un año, se trabaja paralelamente con su agencia, Media Base Sports, en una ampliación de contrato que concediese mayor margen de maniobra.
Las informaciones desde aquel país se han precipitado este miércoles, cuando CNN Turk y 'Fanatik' hablan de un acuerdo con Carvalho y el Betis del Fenerbahce para que, a cambio de cinco millones de euros, bonus incluidos (otras fuentes hablaban de variables hasta alcanzar los 8 kilos), William se marchase a Estambul, un extremo desmentido a ESTADIO por una fuente más que solvente del club de La Palmera, donde no se reconocen siquiera negociaciones formales con los moradores del Sükrü Saracoglu. Antes al contrario, hay conversaciones con hasta dos equipos distintos de otras latitudes, interesados en reclutar a un '14' que ha firmado una campaña 21/22 espectacular, con goles soberbios y decisivos, para confirmar que se encuentra en el mejor momento de su carrera.
El Betis no se cierra en banda a negociar por ninguno de sus futbolistas, aunque, insisten en Heliópolis, tampoco se volverán locos aceptando las primeras ofertas que lleguen, hasta el momento inexistentes, por otra parte, ya que solamente ha habido sondeos o cuestiones acerca de precios o disponibilidades. Unos conceptos que no son considerados de la misma forma por las otras partes. Por ejemplo, el Fulham filtró que sí había llegado a los 10 millones de euros por Álex Moreno, rechazando los verdiblancos la propuesta. Otro club de la Premier trasmitió, a través de un intermediario, que pondría 40 kilos por Borja Iglesias, mientras que el Atlético de Madrid alcanzaba los 30 por Guido Rodríguez si lograba vender antes a Saúl Ñíguez.