Andrés Guardado no se tomó del todo bien sus sustitución frente al Girona el pasado 21 de diciembre donde el Real Betis empató frente al equipo de Míchel en el Benito Villamarín. Justo antes del término de la primera mitad, el mejicano veía la cartulina amarilla por un manotazo sobre Dovbyk. A Manuel Pellegrini no le tembló el pulso y en el descanso decidió dar entrada a William Carvalho por el capitán verdiblanco para evitar correr riesgos de una expulsión. A partir se generó cierta discusión entre el técnico y el jugador, tal y como ha confesado este último en el día de hoy.
El centrocampista mejicano ha hablado en el día de hoy para los micrófonos de la Cadena Ser, donde ha confesado esa discusión con su entrenador. "Simplemente el míster y yo somos como un matrimonio, tal cual. Nos queremos mucho y discutimos también y eso no tiene que asustar a nadie ni mucho menos. Yo no veo tampoco mucho el escándalo que sea por una discusión. Aunque obviamente no gusta que se filtren estas cosas porque al final son cosas muy internas, pero una vez que se filtre a mí me gustaría decir que sí. Sí pasó, discutimos, tuvimos una discusión fuerte pero no es la primera vez que pasa", destacaba Andrés Guardado.
"La verdad que en tres años y medio ha dado para mucho. Ha habido momentos de todo tipo y por eso digo que somos como un matrimonio: nos queremos mucho, discutimos, nos enfrentamos, cada uno quiere ganar, queremos lo mejor para el equipo… al final la relación con el míster es perfecta. Sería tonto de mi parte tener un mayor problema con él porque por él estoy aquí hoy. Él fue el principal motivo por el me quedé un año más aquí y siempre le voy a estar agradecido por ello", mencionaba.
A pesar de ello, el capitán del Betis no esconde que expondrá su pensamiento por el bien del equipo cada vez que haga falta. "Eso no quita que cuando yo vea cosas, como capitán, yo las seguiré diciendo como ya se las he dicho muchas veces", analizaba.
En los últimos dos partidos del Real Betis, Andrés Guardado no ha sumado ningún minuto y la eliminación del conjunto bético en la Copa del Rey frente al Deportivo Alavés también podría ser muestra de la tensión vivida en el vestuario tras la discusión del capitán con Manuel Pellegrini. "Seguramente tengo mucha culpa yo por la discusión que tuve con él. No fue sano para el equipo en general. Asumo si tiene que ser así la culpa. Es momento de estar juntos y olvidar esto", confesaba el mejicano.