Unai Emery ha demostrado se un técnico que, a lo largo de su trayectoria, se mete mucho en la planificación de fichajes de la temporada y ahí, pide lo que conoce. Y en Inglaterra, donde los técnicos ejercen también de manager general en muchas ocasiones tiene más mano para poder hacerlo.
Ya de su época en el Sevilla, pese a que Monchi suele mantener separadas sus áreas y, como ha dicho Sampaoli, él pone las posiciones y el director deportivo sevillista, los nombres, Emery se empeñó en que el '9' que quería era Fernando Llorente. Y eso que Monchi le había traído a Ciro Inmobile para suplir a Bacca y a un Iago Aspas, que no le gustaba y apenas ponía. En el PSG huzo lo propio con Krychowiak. Y en el Villarreal, recién llegado de la Premier League, se 'trajo' a Danjuma, Pervis Estupiñán, Capoue...
Ahora, nada más llegar al Aston Villa y pese a contar con tres laterales izquierdos (Digné, el veterano Ashley Young y el sevillista Ludwig Augustinsson), pidió al mejor español de LaLiga -pese a no ir a la selección- y el equipo 'Villano' le pagó al Real Betis 15 millones más variables para llevarse al lateral bético Álex Moreno. "Álex es un gran jugador. Ha sido uno de los mejores laterales izquierdo de La Liga durante las últimas temporadas y estamos encantados de tenerle con nosotros", señaló el guipuzcoano tras su fichaje.
Pero ha ido aún más allá y quiere también un jugador creativo del centro del campo. Según desveló hace unos días 'Cope Gipuzkoa', Unai Emery había puesto los ojos en su tierra y ofreció pagar la cláusula de rescisión de Mikel Merino, que es de Emery 65 millones de euros.
Sin embargo, el centrocampista navarro no sólo se negó sino que también lo hizo con el gesto que quería hacer su presidente de subirle el sueldo por haberlo hecho.
Ante esta negativa, según señalan en Inglaterra, habría puesto los ojos en uno de sus ex, Dani Parejo, quien podría volver al fútbol inglés catorce años después de que jugara en el Queens Park Rangers cedido por el Real Madrid.
No es el primer jugador del Villarreal que se le relaciona con su antiguo técnico, pues la prensa inglesa ya nombró también el interés por Yeremy Pino o Pau Torres a las pocas semanas de salir. Lo que parece evidente es que está mirando a LaLiga española y con el poderío de la Premier League, nadie puede estar tranquilo. O, al contrario, puede estar frotándose las manos.