Los malpensados se preguntan qué tipo de embrujo ha conseguido el Real Betis con John Textor, el multimillonario estadounidense que posee la mayoría accionarial de tres clubes europeos (Olympique Lyonnais, Crystal Palace y Molenbeek) y uno brasileño (Botafogo). Y es que, en apenas un año, el gurú de la realidad virtual y ex presidente de la plataforma de streaming FuboTV ha comprometido 27 millones de euros, que podrían ser hasta 31 contando las variables, por tres futbolistas verdiblancos que no pasaban, por decirlo de manera elegante, por su mejor momento, dejando todos una jugosa plusvalía en Heliópolis. Todo comenzó el verano pasado con Paul Akouokou, ha continuado este mes de enero con Luiz Henrique y continuará a final de curso con Abner Vinícius. Un negocio redondo en La Palmera que casi nadie se explica allende las fronteras hispalenses.
Y es que el Lyon llegó a poner sobre la mesa bética 15 millones de euros por Guido Rodríguez, propuesta que habría aceptado la entidad presidida por Ángel Haro, ya que, como se ha confirmado después, el campeón del Mundo sigue sin renovar un contrato que expirará el 30 de junio de 2024. Por motivos personales (acaba de ser padre por segunda vez y quería hacerlo en Sevilla), el italo-argentino rechazó la propuesta, como también otra del Nottingham Forest, aunque sorprendió que los franceses se decantaran por su suplente aquí (o el suplente del suplente, para ser más exactos), un Paul que llegó gratis en 2018 al Betis Deportivo y que dejó tres kilos, más el 30% de cualquier venta futura por encima de esas cifras, movimiento difícil por el ostracismo que vive a orillas del Ródano. El próximo verano, llegará el turno de Abner, por el que pagarán ocho millones, según avanza 'ABC'.
Entre medias, Textor llegó al listón exigido por los verdiblancos para liberar a Luiz Henrique, que se convirtió en el fichaje más caro de un club brasileño: 16 millones de euros fijos y cuatro en bonus, dos de ellos de fácil cumplimiento, pues el extremo tiene la promesa del empresario de Missouri de que emigrará al OL próximamente. De nuevo, el Betis consiguió un interesante beneficio, pues acordó con el Fluminense un pago de ocho kilos en tres plazos por el 85% de los derechos del de Petrópolis y variables por valor de 4,6 de las que sólo se han cumplido algo menos de dos millones. Si la entidad tricolor se embolsará 2,4 millones y podría llegar a tres si se cumplen todos los condicionantes de rendimiento pactados, el Athletico Paranaense también se frota las manos con el lateral zurdo, al que vendieron por cinco millones de euros (la mitad del pase), aunque con el compromiso posterior de adquirir otro 20% por dos kilos más.
Cifrando en 8 millones la operación de Abner al Lyon, los rojinegros se llevarán un montante idéntico al de sus vecinos del 'Flu' por Luiz Henrique (2,4), aunque el trato es también beneficioso para el Betis. De esta forma, los 5,6 kilos limpios que le corresponden permiten cubrir la amortización pendiente, que ascendería en verano a 5.250.000 euros, pues el año y medio del lateral zurdo aquí, donde no ha demostrado nada, ha permitido cubrir 1.750.000 aproximadamente de su coste. Salarios aparte, el éxito en la gestión, pese a la juventud del brasileño (23 años) y sus posibilidades de revalorización, es flagrante, puesto que, pese a su discreto rendimiento, será un movimiento contable positivo, lo que repercutirá en el objetivo verdiblanco de conseguir un saldo en verde ante LaLiga en el Límite de Coste de Plantilla Deportiva (LCPD), ahora sobrepasado, aunque seguramente revertido en cuanto se celebre la aprobada ampliación de capital.