Óscar Murillo6 min lecturaSe encendían todas las alarmas este viernes cuando Isco Alarcón salía, de nuevo, en muletas y visiblemente dolorido de una clínica sevillana, donde se sometió a las pruebas de alcance para determinar la lesión exacta que sufrió al meter la pierna izquierda en la trayectoria entre la derecha de Saúl Coco y el balón. Dirían muchos béticos que a dónde iba el costasoleño, que ya se rompió el isquiotibial izquierdo corriendo a por un balón imposible e inocuo ante el Getafe CF, pero esas agresividad e intensidad en la presión, por ejemplo, brindaron dos goles ante la UD Almería. Finalmente, el costasoleño sufre una fractura diafisaria en el peroné izquierdo, dolencia que le convierte en baja segura para las dos últimas jornadas de la 24/25 y le impedirá acudir a la previsible llamada de Luis de la Fuente, por fin rendido a la evidencia y dispuesto a llevarle cinco años después a la selección española.
Lo de la Real Sociedad y el Real Madrid no tenía ya vuelta de hoja, aunque, si todos hubieran puesto de su parte y se hubiesen alineado los astros, no habría que haber descartado tan rápido la Eurocopa 2024. Y es que, consultado el especialista de cabecera de ESTADIO Deportivo, existía un escenario ideal en el que el de Arroyo de la Miel podría haber estado de vuelta dentro de un mes, casi para el primer partido de España frente Croacia (fijado para el sábado 15 de junio a las 18:00 horas frente a Croacia). Explica el doctor Juan José López Martínez que se trata del tipo de fractura menos lesiva de las que pueden afectar al citado hueso de la pierna, aunque el anuncio a media tarde de que pasará definitivamente por el quirófano a principios de la semana próxima, opción que se estaba meditando sin descartar un tratamiento más conservador, no invita al optimismo con los plazos.
"Depende mucho de la altura de la fractura, las molestias y otros factores. La diáfisis de peroné (la parte media del hueso) es una zona bastante buena y agradecida. De hecho, es una zona de injertos, así que, cuando nos hace falta hueso en otras partes del cuerpo, cogemos un trozo de ahí. En principio, esa zona no afecta a la estabilidad. Se puede poner una osteosíntesis con una placa y el paciente estaría jugando enseguida, lo que pasa es que le puede doler. No es una lesión tan grave ni preocupante", desarrolla el médico personal del tenista Carlos Alcaraz. Habla de unas bases que se utilizan para la fijación el hueso o los fragmentos del mismo, fabricadas en titanio o acero inoxidable, que se colocan sobre la superficie y se aseguran con tornillos. Se utilizan, sobre todo, en fracturas de huesos largos, con un resultado muy satisfactorio.
Ahora, olvidado el panorama más benigno, queda descartado que De la Fuente vaya a esperar a Isco. Aunque es cierto que la lista de 26 representantes en Alemania 2024 se conocerá el próximo lunes 27 de mayo, no era imposible pensar en la inclusión del bético si la horquilla de tiempos le situaba en el apartado de disponibles a principios del torneo, aunque, ahora, lo normal es que el peroné izquierdo quede inmovilizado entre cuatro y seis semanas antes de iniciar la rehabilitación. El plazo más largo en estos casos se sitúa en los tres meses que tardó Guido Rodríguez en volver tras romperse el mismo hueso durante un entrenamientos a principios de diciembre de 2023, pero, en su caso, la fractura fue distal. Por tanto, lo esperable es que el malagueño esté recuperado más o menos cuando arranque la pretemporada de la 24/25 a principios de julio.
El protagonista secundario de la lesión del ex madridista, Saúl Coco, aprovechó sus redes sociales para excusarse por "una noticia triste", una vez conocida la gravedad de la afección, detallando el central lanzaroteño que fue "una acción tan fortuita como involuntaria". El internacional absoluto con Guinea Ecuatorial, aplaudido por muchos béticos por un gesto que le honra, desea "toda la suerte del mundo a Isco Alarcón y una buena y pronta recuperación". Lo que sí clama al cielo es que, una vez revisada seguramente la jugada en el VAR, se señalase falta en ataque del costasoleño por parte de un Iglesias Villanueva que se cubrió de gloria con varias decisiones polémicas, incluyendo un flagrante penalti por mano dentro del área de Álex Suárez que, pese a ser advertido de su error por De Burgos Bengoetxea, no reconsideró.