"Abner tiene potencial para ser importante en el Betis y en otros grandes de Europa"

Tiago Nunes (Santa María, 1980) es el actual entrenador del Sporting Cristal peruano. Su primera experiencia fuera de Brasil, donde entrenó a Atlético Paranaense, Gremio, Corinthians o Ceará, entre otros. Ahora, dentro de "un proyecto a largo plazo" que espera le traiga "el salto a Europa", se preocupa de seguir aprendiendo y mejorar su español, ya que sólo hablaba portugués. "Es un mercado competitivo y atractivo, pero con poca tradición reciente de entrenadores de mi país. No sé si el último relevante allí fue Vanderlei Luxemburgo en el Real Madrid. En la Série A, de 20 clubes, casi la mitad son extranjeros. Históricamente, al técnico brasilero no se le incentivaba a estudiar, a formarse, pero las cosas están cambiando", refiere el preparador, que comparte representante con el bético Willian José y, de visita, estuvo 20 días en España el año pasado. "Quizás el paso más lógico sería dirigir en Portugal", admite, aunque se ve con nivel para llegar a Segunda o Primera división de LaLiga.

Mientras trabaja para poner su grano de arena en cambiar "con éxitos y resultados" la credibilidad de su gremio, algo que ya tienen "conquistado los futbolistas brasileños", Nunes adiestra a uno de los tres clásicos del país andino, junto a Alianza de Lima y Universitario, si bien "Sporting Cristal es un club tradicional, el más ganador desde los años 50", que le convenció "con un proyecto claro de formacide jugadores jóvenes; el promedio en el último partido deCopa Libertadores contra River Plate era de 22,8 años". Una idea que compara con la de Paranaense, aunque en Curitiba lleva casi 20 años instalada, no dos o tres. Eligieron invertir en infraestructuras, con un centro de trabajo de primer nivel mundial, apostando por jugadores incipientes. Ahora, en los últimos años, le llegó el momento de los títulos y de competir con los principales clubes de Brasil". El míster de Río Grande del Sur colaboró con una Copa nacional y una Sudamericana.

"Llegué para entrenar al filial. Salieron las cosas muy bien. Hubo cambios en el primer equipo en 2018, se marchó Fernando Diniz y me ascendieron. Ganamos también dos títulos regionales (Estaduales) y la Levain Cup (que enfrenta al campeón de Japón con el de la Sudamericana). Crecimos juntos, dentro de un proyecto muy consolidado en club muy sostenible, de los principales de Brasil en cuanto a gestión", explica Tiago, que fue el responsable de hacer debutar a Abner Vinícius allí. "Al inicio de ese año, había una posibilidad de contratar a Emerson Royal, que estaba en Ponte Petra. Nos lo ofrecieron por 200.000 dólares. Teníamos dudas y no hicimos la inversión. Lo fichó Atlético Mineiro y en dos años había jugado en el Betis y el Barcelona antes de irse al Tottenham. En 2019, ocurre una situación muy parecida con Abner. Un caso curioso y extraño. Costaba más, 2 millones de dólares. Pero Atlético Paranaense ya tenía un acuerdo por Renan Lodi con el Atlético de Madrid y necesitábamos un jugador de futuro, no a corto plazo, porque había allí ya alguien veterano, Márcio Azevedo. Llega con 19 años para formarse, directamente al primer equipo. Le costó un poco su adaptación. Necesitaba más continuidad, sobre todo en la parte táctica defensiva. Era muy ofensivo, no tan extremo como Lodi, que era casi como un delantero. Como carrilero zurdo, llegaba mucho y centraba bien. Le costó coger ritmo de Primera, por lo que ese año juega pocos partidos", recuerda.

Pero todo cambió en la siguiente temporada: "Empezó desde el principio. Atlético Paranaense acostumbra a jugar los Estaduales con el equipo reserva. Sale campeón y fue titular los dos años siguientes. Lo llamó la selección olímpica y, aunque no tuvo muchos minutos, se trajo la medalla de oro. A partir de ahí, su explosión". Un crecimiento de Abner que detalla así: "Mejoró mucho en comportamientos defensivos, coberturas al central, diferentes tiempos si juegas con 3 o 4 atrás, intencionalidad del pase (el jugador brasileño a veces es muy creativo, pero arriesga mucho). No sólo hay que saber jugar al primer toque, sino atinar en el segundo o tercer movimiento. Le enseñábamos vídeos de equipos europeos. Fue cogiendo confianza y resultó un proceso de mejora natural. El jugador tiene que tener el derecho a equivocarse, porque solamente así podrá mejorar y crecer. Ofensivamente, ya lo tenía en su ADN, como casi todos los laterales brasileños. Aquí se piensa siempre en atacar más que en defender".

Sobre su mal momento aquí, su ex entrenador no tiene muchas referencias: "Es difícil comentarlo, porque no conozco el contexto del día a día. Eso suele pasar en todos los equipos. Muchas veces ficho jugadores de Paraguay, Colombia... Llegan con mucha confianza, pero la pierden un día. Pellegrini conoce la cultura del jugador suramericano. Debe haber algo más que una cuestión técnico-táctica. La vida personal de los jugadores influye. Yo perdí contacto con él, pero él tenía un problema familiar grave (se refiere al fallecimiento de su hermano Wesley en 2020 por un cáncer peritoneal). El suramericano en general no suele aceptar apoyos cuando se equivoca. Aquí hay una sobreprotección a los futbolistas por clubes y agentes. No se les prepara, por lo que la mentalidad del jugador cuando llegan los malos momentos es complicada. De todas formas, apenas tiene 22 para 23 años. Ya ha jugado bien antes. Un bajón es comprensible. Es su primera experiencia en Europa, pero creo que es sólo cuestión de tiempo".

Sobre su personalidad, Nunes recuerda que "siempre fue un jugador tímido, introvertido, cerrado. Tenía buena relación con todos, pero no es el típico bromista. Abner es comedido, tranquilo, muy atado a su familia. En el trabajo, siempre concentrado, muy presente en el día a día de los entrenamientos, con ganas de evolucionar y mejorar. En cuatro años las cosas cambian muchísimo, pero era ejemplar". Y no tiene dudas de que el Betis no se ha equivocado con él: "Espero cosas muy buenas de él. La cantidad de brasileños que llega a España y les cuesta adaptarse es grande. Vinícius Jr. también tardó en hacerse con la titularidad y recibió muchas críticas. Cuando salen de su casa, imaginan que todo va a ser igual. El Betis debería pensar en el jugador que será dentro de 3-4 años, no en el que era (muy bueno) en el Atlético Paranaense. Hay que tener paciencia. Tiene potencial y capacidad de mejorar. Debe adaptarse. Puede ser un caso parecido a Emerson. Pero en el fútbol estamos acostumbrados a que todo sea para ayer. Cuando el Betis invierte 5 millones de dólares por el 50% del pase no es capricho de uno, sino que ha pasado por muchos técnicos. Tengo mucha confianza en que Abner sea importante en el Betis y que pueda serlo en otros grandes europeos. Se parecen un poco técnicamente (Emerson y él), pero tienen características distintas. Tiene las herramientas suficientes para serlo. Principalmente, debe trabajar lo mental (imagino que un club importante como el Betis tendrá psicólogos). Si consigue salir fortalecido de esta mala racha, lo logrará".

Por último, el director técnico de Sporting Cristal ve "importante la ayuda de los brasileños y luso-parlantes del vestuario" verdiblanco, pues "encontrar colaboración de personas que ya estén adaptadas es bueno, pero un extranjero debe relacionarse con las personas locales para no aislarse y conocer cultura del club, la ciudad, el país, LaLiga...". Además, dejando a un lado a Willian José ("que lleva años a gran nivel en Europa") y Luiz Felipe ("dio el salto muy joven y no lo tenía controlado"), se deshizo en elogios hacia otro compatriota: "Luiz Henrique es el típico jugador de calle, que encanta a los brasileños y a todo el mundo. Hace cosas increíbles en pocos espacios. Además, con gran una estatura privilegiada. Lo tiene todo para ser un grande de Europa. Eso sí, jugaba muy suelto y muy libre en Fluminense, apareciendo en todas las partes en ataque. Va a tener que pasar por un proceso de adaptación táctica, porque en España hay un juego distinto, más posicional. Las individualidades son determinantes, pero el tiempo de ejecución es otro. Esa educación táctica es algo que nos falta desde el mismo proceso formativo, más centrado en la gambeta, lo técnico. Eso lo suelen aprender fuera".