El Barcelona se encuentra en pleno trabajo. Después de disfrutar de tres días de descanso para recuperarse de la gira por Estados Unidos, el conjunto vuelve a los entrenamientos para prepararse lo mejor posible para el encuentro del martes ante el Tottenham.
La vuelta al trabajo ha despertado ciertas interrogaciones, ya que este nuevo capítulo comienza sin haber terminado de cerrar completamente las salidas de Dembélé y de Kessie.
Aunque como bien se sabe, las negociaciones ya están avanzadas, todavía faltan algunos detalles por pulir, algo que el club pretende agilizar, ya que la idea era poder sellarlas por completo antes de final de semana para cerrar este ‘problema’ y centrarse en los nuevos.
De momento no se ha podido anunciar ningún movimiento oficial, lo que ha provocado que Dembélé esté citado para la sesión de entrenamiento del Domingo. Esto ha sorprendido a los aficionados, ya que el acercamiento del futbolista al PSG ha sido una de las noticias más comentadas de estas últimas semanas, por lo que nadie se esperaba que esto se alargara tanto.
Realmente, aunque parezca que esto solo fastidia al Barça debido a que le retrasa el trabajo al no poder crear una nueva planificación, la realidad es que esto supone un problema para todas las partes, por lo que ambas esperan que pueda solucionarse pronto.
Hay que recordar que la salida del francés fue algo que cogió por sorpresa tanto a la entidad como a los técnicos, sin embargo, el futbolista contaba con una cláusula privada con el club tras renovar el verano pasado, en la que se estipulaba que si antes del 31 de julio alguna entidad mostraba interés por él, debían dejarlo salir sin ningún inconveniente por 50 millones de euros.
El propio jugador viajó a París para cerrar toda esta operación con el club. En el fondo, el FC Barcelona no se esperaba que Dembélé tomara esta decisión, cambiándole completamente todos los planes.
Por otro lado, se encuentra el caso de Kessie, una situación un poco diferente. El Al Ahli ya mostró su interés por el jugador en junio, por lo que intenta buscar la forma de acelerar el proceso todo lo posible, algo que le viene bastante bien al club catalán. El centrocampista tan solo pudo disfrutar de 45 minutos durante toda la gira, por lo que nada más llegar a Barcelona, se comenzó a movilizar rápidamente todo el proceso de salida. El centrocampista llegó el verano pasado libre.