El futuro de Pierre Emerick Aubameyang ha dado un cambio radical en los últimos días. Su salida al Chelsea parecía totalmente encarrilada. El futbolista estaba de acuerdo y, de hecho, su celebración en el duelo ante el Manchester City en el duelo contra el ELA sonaba a despedida. Y al Barça le iba a permitir llegar a la parte final del mercado con 'cash', además de con margen económico, para afrontar los fichajes que tiene aún previstos.
Sin embargo, el violento robo ocurrido en la madrugada del domingo al lunes, en su domicilio, ha tenido consecuencias físicas y lo ha cambiado todo. Según publica 'The Athletic', el delantero del Barça sufre una rotura de mandíbula provocada por un golpe con la culata de una escopeta que le asestó uno de los ladrones que atracaron su casa de Castelldefels. En un principio, el golpe no parecía grave, pero las pruebas médicas posteriores confirmaron la rotura.
Esta lesión puede tenerle más de un mes de baja y ha incidido directamente en las negociaciones con el Chelsea, que se ha replanteado la contratación del delantero gabonés en las condidiciones que tenía más o menos acordadas con el Barça.
De momento, Aubameyang no se entrenará esta tarde con la plantilla que adiestra Xavi Hernández y, de hecho, tendría que esperar varias semanas para poder hacerlo, ya que primero debe consolidarse el hueso. Incluso, cuando esté recuperado, posiblemente tenga que jugar algunos partidos con una máscara protectora.
La voluntad del Chelsea, no obstante, sigue siendo la de contar con el punta gabonés en la presente temporada, pero le habría ofrecido al Barça otra fórmula diferente. Según apunta el periodista David Ornstein, de 'The Athletic', la opción que se ha planteado ahora sería la de una cesión. Unos términos muy distintos, que permitirían liberar masa salarial, pero no contar con dinero para afrontar los fichajes de los dos laterales que el Barça está buscando.
A poco más de 24 horas de que cierre el mercado de fichajes estival, habrá que ver cómo evolucionan las negociaciones entre ambas partes, ya que el Chelsea presiona y el Barça tiene muchos frentes abiertos (Marcos Alonso, Dest, Braithwaite...) como para complicarse con un caso que ya consideraba cerrado. Pese a haber resuelto el caso más urgente (Jules Koundé), el Barça necesita ese margen para poder inscribir a los que llegarán sin tener que hacer más malabarimos.