La retirada de Piqué: ¿Vía libre para hacer negocios con Rubiales?

La nueva Ley del Deporte, aprobada en el Congreso el mismo día del anunció del catalán, impide que cualquier jugador en activo tenga relaciones comerciales con una competición en la que participe, aunque esta ley no tiene carácter retroactivo

José Antonio RiveroJosé Antonio Rivero 5 min lectura

La retirada de Gerard Piqué era algo que todo el mundo se 'olía' que podía ocurrir tarde o temprano, pero bien es cierto que nadie esperaba que un jueves de noviembre de 2022 el central del FC Barcelona anunciase su adiós. El central ha perdido protagonismo en el equipo esta temporada, algo que ya sabía tras la charla que Xavi mantuvo con él este verano, jugando solo por las numerosas lesiones del conjunto catalán. Además, cuando ha participado, Piqué ha estado a un nivel bastante bajo, cometiendo errores impropios en un jugador de su calidad. Su situación con Laporta tampoco era la mejor, ya que el central no llegó a un acuerdo para bajarse su salario. Incluso la afición, al menos un sector del Camp Nou, llegó a silbar al que es una leyenda del club. A todo esto hay que sumar su situación personal, puesto que hace no mucho anunció su separación con la cantante Shakira mediante un comunicando, estando siempre en el foco mediático no solo de la prensa deportiva, sino también de la prensa rosa. "Nadie es imprescindible. Yo soy el primero que me ofrezco a irme si llega sangre nueva para cambiar esta dinámica. Hemos tocado fondo", dijo Piqué en agosto de 2020 después de perder 2-8 ante al Bayern en Champions. Una frase que los aficionados azulgranas y los hinchas de otros equipos le han recordado en muchas ocasiones.

Piqué, muy dado al espectáculo, anunció su retirada con un vídeo, igual que hizo en su momento para comunicar que Griezmann se quedaba en el Barça. En dicho vídeo el central dice "y ya me conocéis, tarde o temprano, volveré". Esa frase da a pensar a lo que tantas veces ha dicho el catalán, "quiero ser presidente del Barça, es mi sueño".

Pero la retirada de Piqué da para mucho más. El central catalán anunció su retirada el mismo día que el Pleno del Congreso de los Diputados aprobó el proyecto de Ley del Deporte. El texto se sacó adelante sin el consenso pretendido por el Gobierno, con 166 votos a favor, 157 en contra y 18 abstenciones. Una nueva Ley del Deporte que ahora tendrá que ser aprobada en el Senado para que entre en vigor.

Uno de los puntos de esta nueva Ley recoge que los jugadores en activo no podrán tener relaciones comerciales con ninguna competición en la que participe. Aunque de ser aprobada por el Senado, lo que se espera que ocurra, esta Ley no tiene carácter retroactivo, por lo que no afectará a relaciones comerciales del pasado. Una de esas relaciones es la de Piqué con Rubiales.

Hay que recordar la empresa Kosmos Global Holdings S.L., propiedad de Piqué y dueña del FC Andorra de la Segunda División, ganó la adjudicación de un contrato valorado en 24 millones de euros por su papel como mediador entre el presidente de la RFEF y Arabia Saudí en la operación de venta de la Supercopa de España al país saudita. Si se termina aprobando la nueva Ley del Deporte esta operación no se vería afectada por la misma, pero no se podría volver a hacer nada parecido, al menos con Piqué jugando.

El organismo que preside Luis Rubiales acordó con Arabia Saudí que la Supercopa se jugase en dicho país durante tres años y a partir de 2020, con opción a otros tres, pero después se renegoció el contrato y el nuevo compromiso abarca 10 años.El destino es caprichoso y ha querido que coincidan el anuncio de Piqué con la aprobación de la Ley en el Congreso. Solo el central sabe si sus negocios también se suman a la lista de motivos por los que el todavía jugador azulgrana ha querido colgar ya las botas.