La redención de Raphinha

Después de ser clave en el pasado año del Fútbol Club Barcelona, cuando emergió como una pieza de muchísima utilidad para Xavi y se adaptó tanto a jugar en banda como por dentro, y sobre todo a canalizar a las mil maravillas la de idea de su técnico, actuando como un acelerador de los suyos desde la derecha, esta campaña, el brasileño ha estado muy lejos de eso. Las lesiones, el aumento de la competencia y la falta de confianza propia y de la afición, le ha minado, disminuyendo sobremanera su protagonismo. Pero esta jornada 26 ha vuelto a su mejor versión, y en el duelo ante el Getafe logró sacarse una espina que llevaba clavada desde hace muchos meses, cuando en el partido de la primera vuelta fue expulsado.

Ante los azulones salió de inicio y respondió, tanto que a los veinte minutos ya había marcado el gol que abrió la lata y fue a la postre crucial para lograr los tres puntos. Pero no fue la única acción decisiva, ya que también le regaló a Frankie De Jong el tercero a falta de media hora para el final. Estas contribuciones, además de su trabajo y su insistencia en la presión, le sirvieron para ser reconocido como el MVP del partido. Un chute moral que le puede venir muy bien para volver a ser el que fue.

Tras el encuentro se mostró muy contento, sobre todo por quitarse el peso de encima de lo que pasó en el Coliseum, ya que era algo que "tenía dentro", además, de que volvía de un periodo inactivo y poder competir de nuevo al máximo le hace estar de nuevo bien. "He vuelto de la lesión y me siento feliz por tener minutos y por volver a marcar y asistir, sin embargo, lo más importante es la victoria, ganar con muchos goles es importante para el equipo", remarcó exultante.

Tras su gran despliegue en la 22/23, cuando anotó 10 goles y repartió 12 asistencias, esta campaña lleva 5 tantos y 8 pases de gol en 24 duelos, mucha menos participación que la que acostumbraba, debido principalmente a la aparición de Lamine Yamal, con el que comparte puesto. Aunque eso sí, le sienta bien jugar con el 'niño'. "Competir con Lamine es un privilegio, porque va a ser un jugador de alto nivel, de los mejores, a competencia nos hace mejores a los dos, querer evolucionar más", además de que siente que en un equipo como el Barça hay que "tener siempre esta competencia".