El FC Barcelona ha dejado claro en los últimos años que uno de sus grandes objetivos siempre ha sido Bernardo Silva. El centrocampista del Manchester City se ha convertido, con el paso del tiempo, en una de las prioridades para la escuadra de la Ciudad Condal, que busca dar un notable paso al frente en todas las competiciones. Pieza clave para Pep Guardiola en la conquista de títulos como la Champions, no habría visto con malos ojos una posible llegada a Cataluña. Sin embargo, parece que esto no se llevará a cabo, ya que la escuadra presidida por Joan Laporta no va a ejecutar un detalle fundamental.
Debido a que la masa salarial sigue excediéndose, el cuadro azulgrana no puede pensar en hacerse con los servicios de Bernardo Silva. Debido a esto, el internacional por Portugal no podrá vestir, al menos por el momento, la camiseta culé. Este es un duro varapalo para las dos partes, ya que, en los últimos años, el jugador había sonado con fuerza para convertirse en refuerzo de un FC Barcelona que sigue luchando para volver a la regla del 1:1.
En el caso de que este movimiento se hubiera llevado a cabo, en el Camp Nou manejaban un punto clave. Silva podría haber abandonado el Manchester City por 60 millones de euros, lo que, a pesar de que estaría alejado de la situación económica que atraviesa en la actualidad la entidad de la Ciudad Condal, podría haber sido afrontado. Tal y como recuerda Marca, para que esto se hubiera llevado a cabo, tendrían que haber ajustado sus cuentas.
Teniendo en cuenta que esta cláusula finaliza el día 30, lo cierto es que la llegada de Bernardo Silva al FC Barcelona, en estos momentos, parece poco menos que una quimera. Debido a ello, habría que negociar con la escuadra ‘citizen’, que no parece muy dispuesta a deshacerse de una de sus grandes estrellas, y menos, a cualquier precio. En todo caso, tendrían que explorar el mercado, en busca de un reemplazo de garantías que les permitiera llevar a cabo una transición en las mejores condiciones posibles.
Habiendo cerrado prácticamente la carpeta Bernardo Silva, el lateral es otra de las prioridades culés. Eso sí, se debe tener en cuenta que la situación no será sencilla, ya que el City aspira a conseguir un traspaso, mientras que el Barça quiere repetir la cesión de la que ha disfrutado durante el curso que ha finalizado hace apenas unas semanas. Estimado en un precio de entre 25 y 30 millones de euros, no parece que este entuerto se vaya a solucionar en los próximos días, por lo que habrá que esperar a ver qué es lo que sucede con un Cancelo que ha mostrado un buen nivel en la Ciudad Condal.