Paula Fiorella Méndez3 min lecturaTras un largo recorrido futbolístico y siete años lejos de su hogar, Samuel Umtiti vuelve a jugar en la Ligue 1. Según ha informado RMC Sport, el central va a fichar en las próximas horas por el Lille, equipo que disputará la próxima Conference League. En las últimas horas, el club francés ha acelerado su incorporación con la idea de que empiece a trabajar junto al equipo lo antes posible.
El futbolista aterriza como agente libre tras haberse desvinculado por completo del FC Barcelona durante el mercado de verano, aunque todavía faltan por determinar los últimos detalles de su contrato antes de hacerlo oficial.
El central ya ha pasado su revisión médica con el Lille siendo un éxito rotundo, por lo que se espera que en las próximas horas se anuncie la gran llegada a su nuevo destino.
La temporada pasada Umtiti jugó como cedido en el Lecce italiano, una oportunidad para abrirse puertas en otras competiciones. Su vuelta supuso un problema a azulgrana, ya que entre sus planes se encontraba dar las máximas salidas posibles, por lo que conseguir que el futbolista cogiera rumbo hacia un nuevo destino, supuso un enorme alivio a la entidad.
Umtiti regresará a una liga que le dio grandes momentos, donde además triunfó en el Olympique de Lyon justo antes de fichar por el FC Barcelona en 2016.
Una de las razones que hizo que el futbolista perdiera un poco sus oportunidades en el equipo formado por Xavi Hernández fueron sus problemas de rodilla, que a pesar de haberlos superado, hicieron que su rendimiento se viera bastante afectado. Sin embargo, eso no le impidió continuar jugando en otros equipos, por lo que se marchó cedido al Lecce disputando 25 encuentros.
Ahora, el internacional francés comenzará la temporada en el Lille tras la salida de José Fonte. El club necesitaba reforzar el equipo con un central experimentado y Umtiti era una de las mejores opciones, sobre todo tras el gran nivel mostrado en los últimos años.
El Lille confía en ver al jugador que fue hace unos años, cuando se convirtió en una pieza indiscutible para el FC Barcelona, algo que se pudo apreciar hasta el Mundial de 2018, donde a pesar de estar sufriendo graves molestias por su rodilla, jugó infiltrado hasta convertirse en campeón del mundo, haciendo una gran e indiscutible pareja con Varane. Desgraciadamente, a pesar de haberlo evitado durante mucho tiempo, tuvo que pasar por el quirófano, aunque eso no le impidió seguir brillando.