Ante el Alavés, una de las imágenes del partido fue el ver a Lamine Yamal sentado en el banquillo culé con cara de enfado. No estaba Lamine Yamal en ese momento para pedirle dinero, precisamente. Sustituido en el 67' por Ansu Fati, al internacional español le costó ocultar su malestar por no seguir en el verde.
Pese a ello, siempre estuvo correcto el joven futbolista, que dio la mano a Hansi Flick tras el cambio. Héctor Font, como relata Sport, fue el encargado de tratar de tranquilizarlo en el banquillo, donde acabó viendo el partido con total normalidad, aunque su habitual sonrisa no se dibujó en el rostro en ningún momento. Con pose seria, el jugador de 17 años asimiló que el fútbol tiene unos códigos que hay que cumplir, por mucho que él desee comerse el mundo ahora mismo.
El cuerpo técnico de Hansi Flick, sin embargo, es consciente de la juventud de Lamine Yamal, de ahí que estén muy encima suya. Por ello, le vienen haciendo la idea de que no puede jugarlo absolutamente todo pese a su edad. Su físico, a la larga, se lo agradecerá.
Y es que la situación de Lamine Yamal en el Barça ha cambiado muchísimo a lo largo del último año, después de que el curso pasado, con 16 años, le costara mucho más acabar los partidos. Ha ganado musculatura y está más hecho físicamente, por lo que aguantar los 90' a pleno rendimiento no es ningún problema.
Flick decidió cambiarlo en Mendizorroza para darle descanso. Ahora parte con la selección y probablemente disputará los dos encuentros de Nations League que España tiene, ante Dinarmarca y Serbia. La vuelta no será cómoda, con partidos ante Sevilla, Bayern de Múnich y Real Madrid, amén del derbi contra el Espanyol.
La temporada no ha hecho más que empezar y el técnico alemán quiere empezar a dosificar esfuerzos, por eso Lamine Yamal fue sustituido o Koundé, por ejemplo, rotó. Era el único futbolista del plantel azulgrana que lo había disputado todo hasta ese momento.
La carrera de Lamine Yamal va demasiado rápida, pese a su edad, y el verano pasado ya no pudo disfrutar de demasiado descanso, alzándose campeón de la Eurocopa con España en Alemania. Una cita en la que fue clave, junto a su compañero y amigo Nico Williams. En el Barcelona, Yamal también se ha consagrado ya como una de las grandes estrellas, de ahí que tenga que medir los tiempos.