Adela Requena4 min lecturaEl FC Barcelona tiene como prioridad, en este mercado de verano, el fichaje de un pivote de primer nivel. Y es que el Barça tiene que buscar sustitutos para Sergio Busquets. La opción preferida de Xavi siempre ha sido Zubimendi, pero la realidad económica de los catalanes les alejaría de hacer posible este deseo. El problema es su precio: 60 millones de euros (la Real exige su cláusula).
Por su parte, Laporta prefiere ahorrarse este 'dineral'. Más aún tratándose de un equipo que se ha ensañado con el Barcelona a partir del Caso Negreira. En este sentido y en las últimas semanas ha aparecido un jugador de la Bundesliga que podría encajar y convencer a todos en la Ciutat Esportiva Joan Gamper. Hablamos de Joshua Kimmich.
A sus 28 años, a la estrella del Bayern Múnich le quedan dos años de contrato con el conjunto teutón y de no lograr cerrar la renovación con el futbolista durante la próxima temporada, el Bayern estaría obligado a hacer caja con él si no quiere que se marche gratis ya en 2025. Por ello, el Madrid anda al acecho y lo tiene como el candidato ideal para suplir las marchas de Kroos y Modric, que acaban contrato en 2024.
Sin embargo, tal y como ha informado Mundo Deportivo, el jugador no está pasando por su mejor momento personal en el Bayern de Múnich. El capitán de la selección alemana está valorando seriamente emprender una nueva aventura fuera de la Bundesliga. Es una posibilidad que ha entusiasmado al entrenador azulgrana y el Barça ha empezado a moverse por él. Además, también puede jugar de lateral derecho, otra de las posiciones que la entidad catalana pretende reforzar este verano.En este sentido, el proyecto del Barcelona, con Xavi al frente, agrada a Kimmich. Por su parte, el técnico azulgrana considera que el fichaje de Joshua Kimmich sería un refuerzo de auténtico lujo para reforzar la medular de la próxima temporada y hace años declaró su gran admiración hacia el internacional alemán durante una visita a un entrenamiento de pretemporada del Bayern en Doha en 2019.
En declaraciones de aquel día, Xavi reconoció que descubrió a Kimmich después de mantener una charla con Pep Guardiola, que era entrenador del Bayern en aquella época, y que desde entonces estuvo muy pendiente de la carrera del polivalente futbolista.
El centrocampista alemán encajaría perfectamente en el perfil de pivote que busca el cuerpo técnico, que estaría encantado de contar con él. No será fácil sacarlo del Bayern de Múnich. Pero sí es cierto que el cuadro bávaro no quiere tener a jugadores que no esté conformes y se sientan bien en el club. En este contexto, recordemos los casos de Kroos, Alaba o recientemente con Lewandowski.
En caso de que el jugador decida marcharse, el Bayern no va a detener su salida. En este sentido, otra de las claves de la operación es que desde el cuartel general azulgrana creen que podrían sacarlo por un precio menor a lo que pide la Real por Zubimendi. De hecho, la venta más cara de la historia del equipo de Múnich fue el traspaso de Lewandowski al Barça, por 45 kilos.
Kimmich tiene buenos amigos en el Barça. Lewandowski le conoce muy bien y tiene una buena relación con el guardameta blaugrana, a quien conoce de la selección alemana.