Francisco Salas3 min lecturaUna de las grandes sensaciones de la pasada campaña en el fútbol europeo fue el Nápoles de Luciano Spalletti, que aupado por jugadores no muy conocidos y con una idea de juego muy dinámica y vertical, pasó por encima de forma inesperada de todos sus rivales en la Serie A, y a punto estuvo de dar un susto en Champions, pero se quedó en la barrera de los cuartos de final. Pero cuando llegó el verano, pese a que pudo mantener a sus piezas más importantes, el técnico transalpino abandonó el barco en busca del sueño de dirigir a la selección nacional italiana, dejando el club en una deriva melancólica de la que le está dejando salir, y que ya ha triturado a Rudi García y Walter Mazzarri, hasta que ahora ha vuelto Francesco Calzona, exasistente del ahora seleccionador 'azzurro'.
No están alcanzando las cotas de genialidad de la 2022/23, pero en el recuerdo queda el gran rendimiento que desplegaron sus jugadores, ya que los más destacados fueron tres, el central Kim Min Jae, que salió rumbo al Bayern de Munich; el punta Victor Osimhen, que sigue llevando la casaca celeste, pero está en la agenda de los principales europeos; y sobre todo Kvicha Kvaratskhelia, el joven georgiano que maravilló al mundo y que rechazó muchas ofertas para salir a un proyecto mayor. Precisamente el extremo está de nuevo en la cresta de la ola mediática, ya que su agente lo ha relacionado con dos equipos, el Fútbol Club Barcelona y el Paris Saint Germain.
Durante una entrevista en un medio ruso, Mamuka Jugeli, quién ya comentó que al 77 le encantaría jugar en el Barça, fue cuestionado sobre si había ofertas procedentes de blaugranas y parisinos, algo que no escondió. "Por supuesto, también hay ofertas para Khvicha de los mejores clubs. ¡Claro! ¿Cómo es posible que no haya propuestas? En mayo se aclarará más”, enfatizó sobre dos opciones muy factibles. La primera porque una estrella de este calibre en Barcelona es necesaria y con 23 años, se adaptaría a la política de futuro culé. Y los segundos porque tras la confirmada marcha de Kylian Mbappé, necesitan un nuevo astro que les guíe.
Si el año pasado fue rutilante, en este, al igual que su bloque, 'Kvara' ha bajado un poco rendimiento, y aún así en 23 partidos de liga ha anotado seis tantos y repartido cuatro asistencias. En cambio, se le resiste la Champions League, donde precisamente está en octavos frente al Barça, contra los que se jugarán el pase a cuartos en el Camp Nou tras empatar en Nápoles, en la que será una buena carta de presentación ante la que puede ser su afición dentro de unos meses.