Fernando Mateos3 min lecturaPerder un Clásico siempre escuece. Pero hacerlo ante tu afición, después de ir ganando y con un gol del rival en el tiempo de prolongación son elementos que hacen más dolorosa si cabe la derrota del Barcelona por 1-2 en el duelo ante el Real Madrid de este pasado sábado en Montjuic.
El choque se puso muy pronto de cara para el conjunto culé gracias al tanto de Ilkay Gündogan, el primero que logra con la camiseta azulgrana. Quizás por eso mismo, el internacional alemán se ha mostrado muy molesto. No ya sólo por los dos goles de Bellingham, que dejan al cuadro catalán a cuatro puntos de su gran rival en la lucha por el título de Liga, sino por la reacción posterior de su equipo.
En este sentido, el ex del Manchester City, donde hizo el pasado curso 11 goles, no se mordió la lengua para criticar la actitud de la plantilla del Barcelona tras este duro varapalo. "Quiero ser honesto, pero sin pasarme. No quiero decir algo erróneo, pero vengo del vestuario y obviamente la gente está decepcionada, pero después de un partido tan importante y un resultado así me gustaría ver más enfado y decepción. Y esto es parte del problema", señaló de forma contundente.
Para Gündogan, el hecho de que no exista esa rabia por perder en el seno del equipo adiestrado por Xavi Hernández supone un problema, pues en su opinión, son detalles que luego tienen su correspondencia sobre el terreno de juego. Por ello, pide más carácter a sus compañeros, alertando de que en caso contrario pueden perder el tren de LaLiga.
"Tienen que aflorar más emociones cuando pierdes, cuando sabes que puedes jugar mejor y hacerlo mejor en ciertas situaciones, y no reaccionas. Esto luego se traslada al campo. Tenemos que dar un paso muy grande en ese aspecto porque si no el Real Madrid e incluso el Girona se van a escapar", advirtió al respecto.
Acostumbrado a competir por grandes objetivos a las órdenes de Pep Guardiola en los últimos años, el centrocampista germano afrontaba su primer Clásico y no escondió su decepción por la derrota, entonando también el ‘mea culpa’ por este duro tropiezo. "No vine aquí para perder este tipo de partidos o permitir que se abran estas brechas. Yo también tengo responsabilidad como jugador veterano para no permitir que el equipo deje que pasen estas cosas. Necesitamos resistencia", sentenció.