En estos momentos, Héctor Bellerín y Marcos Alonso lo único que tienen en común en el FC Barcelona es que ambos son laterales. Están viviendo realidades muy dispares. Los dos llegaron al Camp Nou cuando el cierre del mercado estaba dando sus últimos coletazos y firmaron por una temporada; pero el parón provocado por el Mundial de Qatar 2022 le ha servido al club para tomar decisiones bien distintas sobre ellos.
El Barça tiene decidido que no renovará a Bellerín. Su rendimiento ha defraudado al club azulgrana, que ya busca un lateral derecho con solvencia en el mercado de invierno. El ex verdiblanco fue una opción económica, al no tener posibilidades el Barcelona de hacerse con los servicios de Thomas Meunier, César Azplicueta o Juan Foyth. El catalán reunía entonces todos los requisitos para un Barça sin fondos: carta de libertad del Arsenal y dispuesto a aceptar una ‘pobre’ ficha de 400.000 euros, la más baja de todo el equipo. Un caso completamente distinto es el de Marcos Alonso, que aterrizó en Barcelona en unas condiciones similares a las de Bellerín, pero que ha logrado asentarse en la disciplina blaugrana.
El madrileño se ha desenvuelto con soltura como central, una posición que no es habitual para él. Su capacidad de adaptación, su forma física y su rendimiento han encontrado la recompensa en forma de una renovación por dos años, unida a unas mejores condiciones salariales.
Bellerín, por su parte, es el segundo jugador del Barcelona con menos minutos de la plantilla, solo por delante de Memphis Depay. El de Badalona ha jugado 321 minutos; mientras que Alonso le triplica los números (853’). En muchas ocasiones, a pesar de estar disponible para Xavi Hernández en los últimos partidos antes del Mundial de Qatar 2022, el míster prefirió alinear a otros jugadores, como Koundé o Balde.
Precisamente la situación de descartado que vive Bellerín en Barcelona ha abierto una nueva página entre Manuel Pellegrini y Jose Mourinho. Ambos están interesados en hacerse con el fichaje del lateral. La Roma busca un lateral derecho para sustituir a Rick Karsdorp y habría solicitado al Barça un traspaso a bajo coste (teniendo en cuenta que acaba contrato el junio) o incluso una cesión para lo que resta de temporada para que luego el futbolista quede libre. El problema para el portugués, como apuntamos desde ESTADIO Deportivo, es que el míster del Betis ha lanzado una presunta llamada a Bellerín para que mantenga la calma y vuelva a Heliópolis.