Ya hay 'fumata blanca' en el FC Barcelona. Tras una semana debatiendo si fichar a un centrocampista en el mercado de enero o no para reemplazar al lesionado Gavi, el club azulgrana ha tomado una decisión. Han sido muchos los nombres que han vuelto a sonar, como Lo Celso, Thiago Alcántara o Guido Rodríguez. Pero, finalmente, en la entidad barcelonista han hecho cuentas y han optado por la vía más económica.
Es cierto que Xavi Hernández, sin el sevillano, necesita un jugador más para que la competencia en la plantilla no baje y, tras recibir la autorización de LaLiga EA Sports, tanto la dirección deportiva como el cuerpo técnico han llegado a la misma conclusión: traer antes a Vitor Roque.
Según Mundo Deportivo, el club ya tiene el OK de LaLiga para poder inscribir al delantero brasileño, que llegaría como cedido hasta junio, pese a estar ya fichado para la temporada que viene, procedente del Atlético Paranaense.
Aunque lo más lógico era fichar a un jugador que jugase en la misma demarcación que Gavi, el Barça se niega a fichar por fichar y, tras revisar el mercado, no encuentra a nadie con sus características.
Cabe recordar que a Vitor Roque lo ficharon el pasado mes de julio, si bien para su llegada el Barcelona necesitaba ingresar los 40 millones que tenía pendientes de Líbero por la venta de 9,8% de las acciones de Barça Studios. Y ante la indecisión del fondo inversión alemán, el club aún no tiene previsión de dicho ingreso, por lo que ha optado por traerlo, al menos, como cedido hasta junio.
Así y una vez recibida y leída la normativa de LaLiga que les permite incorporar al delantero brasileño utilizando el 80% del coste que se libera por el centrocampista sevillano en base al artículo 77 de lesiones de larga duración, Xavi ha dado el visto bueno a la operación. Una vez concluya el presente ejercicio, en el Camp Nou esperan haber generado ya suficiente 'fair play' para poder inscribir a Vitor Roque con su contrato original.
Lo único positivo para el de Terrasa en este asunto es que, a partir de ahora, tendrá menos quebraderos de cabeza para construir su 'sala de máquinas'. Y es que con el regreso de Pedri y De Jong, más el joven Fermín y Gündogan, se antojaba un problema el poder colocarlos a todos juntos. Ahora, salvo contratiempo, ya parece claro cuál será el centro del campo culé.