El Atlético de Madrid afronta el tercer duelo de la temporada ilusionado. Tras la multitud de fichajes que han aterrizado en el Metropolitano en este mercado, el club continúa con paso firme hacia sus objetivos esta temporada. Después de debutar con empate 2-2 ante el Villarreal, el Atlético de Madrid pasó por encima al Girona con un 3-0 en el Metropolitano. Ahora, los rojiblancos se adentran en la jornada intersemanal en la que se enfrentarán al Espanyol y dónde las rotaciones juegan un papel crucial según ha aclarado Simeone en rueda de prensa.
"Iremos gestionando según como los veamos a ellos. A veces es bueno rotar, a veces es mejor mantener la continuidad del equipo. Siempre el partido más importante es el que nos va a tocar mañana, que es el Espanyol, que viene de hacer un partido muy bueno con la Real Sociedad. El partido con el Valladolid fue bastante competido (en la derrota en la primera jornada del conjunto blanquiazul en el Nuevo Zorrilla)", aclaró Simeone en torno a las rotaciones. "Pero contra la Real Sociedad llegó hasta el final organizado, trabajándolo bien, con pocos cambios hasta el final del partido, porque, por ende, el entrenador estaba viendo lo que estaba sucediendo, que estaba siendo un partido muy correcto. Nos imaginamos un partido similar al que estoy contando y, a partir de eso, prepararemos el partido con lo que creemos que le podemos hacer daño", prosiguió Simeone.
Simeone destacó la pasada semana que las características de su compatriota y delantero Julián Álvarez se acercan al 'adn' del Atlético de Madrid. Para él, ese 'adn' es "todo lo que representaron un montón de futbolistas importantes como Gabi, Torres, Godín, Griezmann, Koke... Me vienen en mente mil jugadores. Creo que esta representado en muchos futbolistas y todos lo entienden rápidamente", explicó.
Por último, quiso hacer referencia a la pausa de hidratación. En el partido anterior, Simeone, al ver la cámara en el rondo de los jugadores mientras daba las instrucciones, decidió girarse y darle la espalda al camarógrafo para que no pudiese ver lo que indicaba a sus pupilos. "Lo veo como parte de la posibilidad del entrenador rival de escuchar lo que vos estás hablando con los otros en el minuto que hay de parón. Está claro que sirve porque todo genera espectáculo, pero para los entrenadores claramente no nos sirve", sentenció.