Este jueves es el Día Mundial de la Salud Mental. Una fecha muy señalada para hablar de un tema que, durante muchos años, por desgracia, ha sido tabú en muchos, por no decir todos, sectores de la sociedad. El mundo del fútbol también ha vivido esto, y, poco a poco, se va rompiendo este estigma. Una persona que está ayudando a que esto pueda evolucionar y cambiar es Álvaro Morata, quien, en las últimas horas, ha hablado abiertamente de este asunto y de todo lo que le sucede, que no es nada sencillo. El ex jugador del Atlético de Madrid ha roto la imagen que se tiene de los futbolistas y se ha abierto en canal para hablar de sus emociones y de cómo se ha sentido en los últimos meses.
En el programa Herrera en Cope, Morata, que realizó una de sus mejores temporadas a nivel goleador el pasado curso con los de Diego Pablo Simeone, ha querido darle las gracias tanto a su antiguo entrenador, al consejero delegado de la entidad, Miguel Ángel Gil Marín, como a su amigo y capitán, Koke, el jugador con más encuentros disputados con la camiseta del Atlético de Madrid. En su entrevista, el del Milan ha querido ser claro sobre todo lo que ha ido viviendo en los últimos tiempos.
“Lo pasé muy mal. Yo pensaba que no iba a poder volverme a poner las botas … gracias a Simeone, Koke y Miguel Ángel Gil, mi psiquiatra, mi 'coach'... Somos lo que se ve en las redes y ese mundo no es real. Lo pasé muy mal y exploté y hubo un momento en el que no me podía abrochar las botas", explicaba. Ahondando en la cuestión, ha revelado que su presencia en la Eurocopa, la cual levantó como capitán de la selección española, pudo haber peligrado.
"Tres meses antes de la Eurocopa, la cosa más remota que me pasaba por la cabeza, ponerme la camiseta y ser capitán… Estaba pensando en saber si podía volver a jugar un partido. No sé qué me pasaba. Es muy delicado y en ese momento te das cuenta de que lo que más te gusta en el mundo es lo que más odias. Me daba vergüenza estar con mis hijos. Siempre que salía con ellos tenía algún episodio. La gente les preguntaba sobre fútbol o algo que había pasado en los partidos anteriores".
"Al principio pensaba en quedarme y tenía muchas ganas de quedarme en el Atlético. Me di cuenta en una entrevista en la que dije que no sabía si seguiría en la selección por edad, por otras cosas fuera del fútbol... y se montó una buena. Algunos escribían y, en mi opinión, alguna noticia fue desmedida y me di cuenta de que eso en Italia no me pasa. La gente me tiene respeto", aseveró.