Aitor Torvisco5 min lecturaAntoine Griezmann siempre aparece cuando más falta le hace al Atlético de Madrid. Al francés le ha costado recuperar el brillo después de la lesión de tobillo que le hizo perderse más de un mes de competición, pero este sábado ha celebrado un doblete salvador en la remontada de su equipo ante el Girona FC, para hacerse fuerte en la cuarta plaza y empezar a asaltar el podio de LaLiga antes de viajar a Dortmund en busca de las semifinales de la UEFA Champions League. "Queremos estar el año que viene en Champions y eso pasa por LaLiga", manifestó el '7' rojiblanco, que admitió que la polémica acción de Reinildo Mandava sobre Savinho "puede ser penalti" y explicó su sorprendente celebración con ayuda de Rodrigo de Paul, bailando con los puños cerrados en alto y girándose sobre sus ejes.
"Era muy importante ganar hoy. Queremos estar en Champions el año que viene y sabemos que conseguir eso pasa por LaLiga, así que había que hacer un gran esfuerzo para ganar. El entrenador puso piernas frescas (seis cambios con respecto al pasado miércoles), es verdad que no hemos empezado bien con ese gol del Girona (Dovbyk en el 2'), pero luego fuimos a buscarlos y fuimos otro equipo", declaró Griezmann ante las cámaras de DAZN, nada más terminar el choque de la sobremesa de este sábado en el estadio Cívitas Metropolitano.
"A seguir así. El fútbol es el presente y hay que seguir trabajando, mejorando, buscar lo mejor para el equipo y hacer lo mejor posible para encontrar el sitio donde hacer daño al rival y disfrutar como lo estoy haciendo", añadió, pensando ya en el Borussia de Dotmund: "Sabemos que necesitamos empatar o ganar allí. Queremos pasar a semis como sea. Ahora, a descansar bien". "Era muy importante ganar hoy", insistió el máximo goleador de la historia del Atlético de Madrid.
Griezmann marcó el 1-1, de penalti, y el 3-1, con un derechazo para aprovechar el regalo de Jhon Solís. Este último no sólo lo marcó con su pierna menos buena, es que le dio con el hueso. "Lo metí con el tobillo malo", declaró al ser preguntado por qué se señalaba ese tobillo (aún luce un fuerte vendaje) al marcar. "Buen vendaje. Muy contento por los goles, por ayudar al equipo y por los tres puntos".
No fue su único festejo. También se fue a la banda junto a Rodrigo de Paul, cerró los puños y se llevó las manos por encima de la cabeza y comenzaron a dar brincos y a girar. "Le mandé a De Paul un mensaje. Hay una gran amistad entre Rodri y yo y lo hicimos para Amaro (hijo del '7'), que nos había pedido que lo celebrásemos así", explicó el francés, que dejó el bromista baile para el 3-1, pues en el 1-1 no estaba la cosa para menear la cintura.
El futbolista colchonero admitió que "puede ser penalti" la acción de Reinildo Mandava sobre Savinho con 1-1 en el marcador, justo antes del tanto de Correa en la última acción del añadido de la primera mitad. "Al final, ha sido una jugada muy rápida, no sé si dentro o fuera, no sé si falta, pero sí pareció por la intensidad de la jugada. La gente del VAR no sé qué le dijeron". Míchel, Savinho e incluso la afición del Athletic no entienden por qué De Burgos y Soto Grado no vieron nada, pero incluso Griezmann se muestra sorprendido.