Alberto Gálvez3 min lecturaMuchas veces más vale prevenir que curar, pero en el caso de Samu Lino el daño ya estaba hecho cuando Simeone decidió sustituirle ayer en el descanso en Balaídos. Eso sí, de haber seguido jugando podría haber empeorado y podríamos estar hablando de un tiempo mayor de recuperación.
Tras haber sido sometido a las pertinentes pruebas médicas, el Atlético ha confirmado hoy que el extremo sufre "un esguince de rodilla de grado moderado". Y aunque no especifica periodo de recuperación, este tipo de lesiones requieren, al menos, tres semanas de baja. "Nuestro jugador comenzará a recibir sesiones de fisioterapia, se someterá a entrenamiento de readaptación y queda pendiente de evolución", añadió la entidad en sus canales oficiales.
De esta forma y con un calendario tan frenético como el que tiene ahora el equipo de Simeone, Samu Lino se perderá, como mínimo, los próximos cinco partidos del Atlético: Celtic, Alavés, Las Palmas, Celtic y Villarreal.
Cabe recordar que la lesión se la produjo en el minuto 38 cuando, en una disputa con Starfelt intentando que no saliese el balón por línea de fondo, chocó con el jugador del Celta. Recibió asistencia médica en la banda por parte de Óscar Celada e, incluso, terminó el primer acto protagonizando dos jugadas de ataque más. Hasta entonces, Samu Lino estaba siendo, una vez más, el jugador más incisivo del ataque colchonero. Todos sus compañeros le estuvieron buscando viendo que el Celta tapaba los espacios por dentro una y otra vez. Hasta que al final se 'rompió'.
Al llegar a los vestuarios e intercambiar impresiones con el cuerpo médico y técnico, todas las partes optaron por no forzar porque el dolor sólo podía ir a más y, aunque en caliente no le dolería tanto, cuando se le enfriara éste iba a ser mayor. El propio Simeone en la rueda de prensa post partido se temía lo peor. "Está ahí con un golpe importante. Esperemos que sea lo menos posible", explicó el argentino en declaraciones a Dazn al término del choque. Al menos, el susto se ha quedado sólo en es un esguince, si bien es cierto que el periodo de estas lesiones depende de tantos factores que es difícil saber cuándo volverá a estar disponible.
Ayer en su lugar entró un motivadísimo Rodrigo Riquelme, quien defendió el puesto con la misma intensidad y casi la misma verticalidad. Ahora, habrá que ver si el técnico colchonero decide esta semana en la Champions League seguir confiando en él o busca nuevas soluciones en ataque ante el Celtic.