Aitor Torvisco6 min lecturaSiempre pasional hasta el extremo, sobre Diego Pablo Simeone se pueden decir muchas cosas, por su vehemencia en la banda, por un carácter que le ha llevado a tener diferencias con algunos futbolistas o por sus juegos de (pocas) palabras en las ruedas de prensa. Lo que no se le puede reprochar nunca al Cholo es que haga como otros muchos colegas suyos que buscan el despiste, ocultando sus bazas y escondiéndose de las cámaras antes de probar nuevos métodos en los entrenamientos. Baste con poner el ejemplo de lo sucedido hace dos semanas en la previa del duelo liguero del Atlético de Madrid contra la UD Las Palmas, cuando no sólo mostró sin tapujos su intención de colocar como '9' a Marcos Llorente y reservar a Antoine Griezmann, sino que respondió a los incrédulos alineándole de inicio, dejando sin jugar al 'Principito' y con sendos dobletes del '14' y de Ángel Correa, más otro tanto de Memphis Depay para redondear la manita.
En este sentido, pocos son los que creen que el Atlético vaya a prescindir de Griezmann para el duelo de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey que el cuadro colchonero juega en la noche del jueves ante el Athletic Club, en San Mamés y teniendo que remontar un marcador de 0-1 del encuentro de ida con un gol de penalti anotado por Alex Berenguer. Además, Simeone tiene entre algodones al propio Marcos Llorente, que no se ejercitó con el grupo en la tarde del lunes, en la vuelta al trabajo en la Ciudad Deportiva de Majadahonda tras gozar el domingo de un día de descanso, y trabajó sólo de manera parcial este martes.
Griezmann siguió un día más al margen del resto de sus compañeros y la tesis que siguen defendiendo desde el Atlético mantiene un supuesto consenso de no forzar el regreso del máximo goleador de la historia colchonera, que sufrió un esguince de tobillo en la ida de los octavos de final de la UEFA Champions League contra el FC Inter de Milán. Los rojiblancos también deben buscar la remontada contra el cuadro 'neroazzurro', en esta ocasión como locales tras el 1-0 en el Giuseppe Meazza, y los últimos resultados invitan a pensar en que la luchar por defender la cuarta plaza en LaLiga va a ser encarnizada en estas 13 últimas jornadas.
Al margen de lo que suceda finalmente con el delantero francés, para la trascendental cita del jueves en Bilbao son bajas seguras los lesionados José María Giménez, con una enésima dolencia muscular, esta vez en el muslo; César Azpilicueta, operado de una rotura de menisco; y Thomas Lemar, quien lleva muchos meses alejado de los terrenos de juego por culpa de una rotura del tendón de Aquiles de la que afronta ya la última fase de recuperación.
Aunque ya salió de la lista de lesionados, cabe recordar que Álvaro Morata forzó para volver lo antes posible tras el esguince de rodilla que sufrió en el encuentro contra el Sevilla FC del pasado día 11 en el Ramón Sánchez-Pizjuán y aún no está al cien por cien. Asimismo, a pesar de que venían mostrándose muy acertados en este arranque de 2024 y de que el entrenador argentino asumió toda la culpa del pinchazo, dejó mucho que desear el encuentro de Ángel Correa y Memphis Depay en el 2-2 del pasado sábado contra la UD Almería, el colista de LaLiga EA Sports, en el Power Horse Stadium de la localidad andaluza.
A pesar de todo ello, el once con el que ensaya Simeone suele ser calcado al que luego forma de inicio y, en este sentido, tras lo visto en los dos últimos días, la alineación inicial para saltar al Nuevo San Mamés en busca de otra final de Copa será la compuesta por Jan Oblak en portería; línea de tres centrales para Stefan Savic, Axel Witsel y Mario Hermoso; con Nahuel Molina (o Llorente) y Samuel Lino en los carriles; centro del campo con el capitán Koke Resurrección, acompañado de Rodrigo de Paul y Pablo Barrios; y con Ángel Correa y Álvaro Morata en la delantera a la espera de ver qué sucede con Griezmann. ¿Cartas bocarriba o farol del Cholo? Habrá que esperar al jueves para verificar su jugada.