Asier Villalibre volvió a entrar en la convocatoria ante el Girona, pero también volvió a quedarse sin disputar ni un sólo minuto en Montilivi pese a que su equipo incluso fue perdiendo en el marcador y necesitaba anotar para no irse de vacío de tierras catalanas.
Pero el delantero lo tiene claro. Este año no se moverá de San Mamés como sí hiciera el curso pasado marchándose al Alavés en mitad de la temporada. Eso sí, la jugada le salió redonda y fue el gran artífice del ascenso del conjunto vitoriano a LaLiga EA Sports. Al menos, así lo han desvelado los compañeros del diario vasco El Correo. El de Guernika sabe que es la última alternativa en ataque mientras esté Ernesto Valverde sentado en el banquillo rojiblanco, pero desea seguir luchando por ganarse un puesto en el equipo.
Hace un mes, el ariete se mostraba feliz pese a las pocas oportunidades que estaba teniendo: "Estoy mejor que el año pasado, ahora paticipo unos minutos en los partidos". Asumiendo el gran inicio de Guruzeta, Asier era consciente de que la temporada iba a ser dura. Ahora y pese a haber disputado sólo 141 minutos distribuidos en siete encuentros y de no haber gozado todavía de una titularidad, el atacante de 26 años se muestra con sus ilusiones intactas y dispuesto a triunfar donde siempre quiso, en el Athletic.
Su gol al Cádiz en septiembre (3-0) hacía presagiar una campaña diferente para él, pero todo apunta a que será igual o peor que la 2022-23. Sobre todo, porque sus compañeros en ataque están respondiendo y, salvo lesiones, tendrá que esperar para tener el protagonismo deseado.
Tras anotar el penalti que devolvió a Primera al Alavés, Villalibre llegó ansioso este verano de poder reivindicarse en San Mamés. Y tras una pretemporada luchando por convencer a Valverde, se quedó. Pero, visto lo visto, para ser el último delantero. Con contrato hasta junio de 2025, el 'Bufálo' quiere seguir intentándolo.
Y de uno que se agarra a un clavo ardiendo para continuar vistiendo la elástica bilbaína a otro que está haciendo todo lo posible para renovar: Nico Williams. El menor de los hermanos está últimamente en boca de todos los aficionados del Athletic por los rumores que existen sobre su posible marcha de San Mamés. Y es que, el próximo 1 de enero, el pequeño de la saga podría negociar con quien considere oportuno para decidir el próximo paso a dar en su carrera.
Y tras finalizar el partido con el Girona, el internacional español se mostraba así de tranquilo cuando le preguntaban por el asunto: "Yo estoy feliz en Bilbao, que la gente tenga tranquilidad".Asimismo, el director de Fútbol, Mikel González, también aprovechó la ocasión para salir al paso de dicha rumorología: "Le veo muy feliz en el Athletic. Hay mucho ruido respecto a Nico. Cuando un jugador se quiere quedar y el club quiere que se quede... lo normal es que se quede".