La temporada se ha terminado ya a efectos teóricos aunque en la práctica aún quede por disputar una última jornada que el Athletic Club afronta con total relajación, como se ha podido ver en la rueda de prensa que ha ofrecido Ernesto Valverde en la mañana de este viernes en Lezama, antes de viajar a Madrid para visitar al Rayo Vallecano en Lezama en un partido en el que lo único que estará en juego será el Trofeo Zamora de Unai Simón, así como el componente emocional que baña este intrascendente partido por las despedidas como rojiblancos de Raúl García, Dani García, Asier Villalibre y de Iker Muniain. A la espera de saber qué sucede con otros pensativos como Álex Berenguer o Ander Herrera, el único que no se podrá despedir sobre el césped será el capitán, que no viaja por culpa de una inoportuna conjuntivitis aguda. También se pierde el duelo en Vallecas Ohian Sancet, que se recuperó a tiempo de su lesión muscular pero se ha caído por un proceso febril. No obstante, para bajas por motivos inverosímiles, la historia de Iñaki Williams que ha revelado el propio técnico aún con cara de asombro y risa suelta de ser aún incapaz de creer lo que él mismo estaba relatando.
El mayor de los hermanos Williams suma 14 goles, 12 en LaLiga y 2 en Copa, así que en esta última jornada tenía a su alcance la oportunidad de alcanzar su mejor registro goleador en una temporada, que son los 15 tantos que celebró de la 15/16, e incluso de luchar por ganar el Trofeo Zarra al máximo goleador nacional, aunque habría necesitado como mínimo un 'hat-trick'. Sin embargo, justo cuando se conocía que ha sido premiado con el MVP al Mejor Jugador Africano del año, el Athletic anunciaba que el '9' pasa por el quirófano para solucionar una dolorosa cicatriz y se despide hasta el curso que viene, dando por terminada ya esta temporada. Dicho así ya suena rocambolesco, pero no es nada para el relato que expuso en sala de prensa un todavía ojiplático Valverde.
"Muniain no está, Sancet tampoco... y los demás están bien. Bueno, además de 'Guru'. "Ah, y de Iñaki, es verdad", decía entre risas después del apunte de un periodista y antes de soltar un soplido como primera respuesta a la pregunta de qué le ha pasado exactamente al delantero hispano-ghanés. Tras unos segundo con gesto de 'A ver por dónde empiezo...', el técnico 'zurigorri' arrancaba poniendo en antecedentes: "A ver, lo de Iñaki es de hace dos años, estando de vacaciones tuvo un incidente... un problema... vamos, que pisó sin querer los cristales de un vaso o de una copa rota, no sé muy bien qué era, y se hizo una herida muy profunda en la planta del pie izquierdo".
"Eso pasó hace dos años, se curó y ya está; pero desde hace unos meses está teniendo dolores en la cicatriz, ha estado siguiendo un tratamiento y ya después de la final de Copa se le hizo una resonancia para ver que le pasaba... y tenía todavía un cristal metido dentro del pie. ¡Le cosieron y le dejaron un cristal de dos centímetros dentro del pie! Según el médico, había que extraerlo porque se estaba aproximando a un tendón o yo que sé. Lo cuento medio riéndome porque nos reíamos el médico viendo los resultados de las pruebas. Es que no nos lo podíamos creer. Iñaki Williams me ha autorizado a contar la historia por que es digna de ser contada. Ha batido un récord de partidos jugados y ha ganado una Copa con un cristal de dos centímetros metido en la planta del pie. Es alucinante, pero es así", completó ante el asombro de todos.
Hace un año y medio, Iñaki Williams una espectacular racha de 251 partidos ligueros consecutivos, récord absoluto en la historia de LaLiga. El atacante rojiblanco no se perdió ni una sola jornada desde el 20 de abril de 2016, cuando se enfrentó al Atlético de Madrid en San Mamés, hasta el 29 de enero de 2023, cuando se perdió una visita al RC Celta de Vigo en Balaídos por culpa de una sobrecarga muscular en los isquiotibiales de su pierna derecha. Esta misma temporada sólo se ha perdido cinco partidos, todos ellos al estar concentrado con Ghana para la Copa de África, y ha tenido minutos en 39 de los 40 encuentros restantes con el primer duelo copero ante el Rubí como el único en el que se quedó en el banquillo. Suma 3.187 minutos y ha vuelto a ser decisivo para su equipo... obviando un cristal de dos centímetros en el pie. Más increíble que el salto al cine junto a su hermano Nico y de la mano de Will Smith.