El caso de Unai Núñez es bastante peculiar. Después de cinco años en el primer equipo del Athletic Club tras pasar por casi todas las categorías inferiores en Lezama, el fornido central de Portugalete se quedó sin sitio con Ernesto Valverde y se le buscó una salida que se cerró con una cesión por dos cursos al RC Celta de Vigo que incluía una obligación de compra de siete millones de euros si los celestes se quedaban en Primera división. Justo tras completarse ese traspaso definitivo, en Balaídos le pusieron en el mercado y ha acabado regresando a la manada de leones que comanda el 'Txingurri' a préstamo y con una opción para quedarse a final de esta ilusionante 24/25. Su regreso a Bilbao lo ha afrontado con máxima felicidad por reencontrarse con "amigos", con motivación por las cuatro competiciones en liza y con curiosidad, como todos, por preguntarle a Nico Williams qué había sucedido realmente este pasado verano. Así lo ha explicado el zaguero de 27 años este miércoles en rueda de prensa.
"El Celta me tenía que fichar con una obligación de compra, la ejecutaron como tenía que ser y se encontraron con unos problemas económicos. Tenían que liberar a unos cuantos jugadores y ahí, cuando aparece la posibilidad de volver a casa, no me lo pensé dos veces. Se pusieron de acuerdo los dos clubes y yo tuve la suerte de venir aquí para poder ayudar al club de mi vida y a unos compañeros que, además, son amigos míos. Estoy muy contento de haber vuelto a la que considero mi casa".
"Salí de aquí hace dos años, que no es mucho, pero entonces era un chaval más joven y con menos experiencia. Salir fuera te hace ver la vida de otra manera, te hace madurar a la fuerza. En estos dos años he cogido una experiencia importante para poder ayudar al equipo. Cuando sales del Athletic es muy difícil volver pero yo he tenido esa suerte. Soy el mismo chaval pero con más partidos en mis piernas. Esa experiencia y esas vivencias fuera de Lezama van a venir bien al equipo y también a mí personalmente. Estoy súper agradecido y muy contento", ha añadido sobre su regreso.
Yeray Álvarez y Dani Vivian, que han comenzado la 24/25 de titulares, y Aitor Paredes, recien salido de lesión, están a priori por delante de Unai Núñez en los planes de Valverde. No obstante, llega con el pensamiento de que este año habrá muchos partidos y con la intención de ser importante para el equipo rojiblanco: "Me fui en busca de minutos, he tenido la suerte de poder jugarlo prácticamente todo, he cogido la experiencia suficiente y la mentalidad para ayudar a conseguir los objetivos que queremos todos. Ahora, vengo para aportar al máximo para que el equipo acabe mejor que el año pasado, que es muy difícil. El objetivo es estar a la altura de lo que hicieron el año pasado y poner las cosas difíciles a Ernesto para poder jugar el máximo de minutos posibles".
"Me ha dicho que trabaje y que los minutos no se regalan a nadie. Que con el trabajo llegarán las oportunidades y que las tenemos que aprovechar. He venido a trabajar y ayudar al equipo, son muchas competiciones y partidos y vamos a necesitar de todos", explicó sobre sus primeras charlas con Valverde. "En todas las plantillas hay cuatro centrales, esos cuatro centrales entrenan cada día para demostrar al míster que pueden jugar. Yo he venido con la idea de poder entrenar y demostrarle al míster que puede contar conmigo. Hay muchos partidos y yo lo que quiero es jugar, eso está claro. Voy a darlo todo".
Unai Núñez, cómo no, fue cuestionado por cómo ha vivido todo el ruido en torno a Nico Williams: "Lo he vivido todo desde Vigo y me preguntaba mucha gente, pero como muchos otros no sabía lo que estaba pasando. Lo importante ya es que Nico está aquí, es donde quería estar y que está en un club grande. Desde que empezó la liga y acabó el mercado está con todos los compañeros a tope y tenemos que arroparle, porque es un chaval joven y hay que meterle caña como a todos, a mí también, para que todos los jugadores puedan dar siempre su mejor versión".