Aitor Karanka puede ser considerada como una de las leyendas del Athletic Club. El que fuera futbolista rojiblanco en dos etapas distintas (1993-1997 y 2002-2006) conoce muy bien todos los entresijos del fútbol tanto desde el punto de vista del jugador como del entrenador. Ahora se encuentra sin equipo tras una última experiencia en el Maccabi Tel Aviv y aprovecha para ver mucho fútbol a la espera de una oferta que le satisfaga.
"Siempre he antepuesto mi familia a cualquier oferta y ahora es un poco más de lo mismo. Escucho ofertas porque me gustaría seguir entrenando, pero, tiene que ser algo que me motive de verdad. La prioridad es algo que de verdad me llene y me aporte. Aunque estuve lejos de mi familia, la última experiencia fue fantástica. Viví en una gran ciudad como Tel Aviv y entrené a un club como Maccabi, que es el más grande de Israel", explica.
Entrando en materia del Athletic Club, cuando le preguntan a Karanka cómo calificaría lo que ha hecho Valverde no ya sólo esta temporada, sino durante sus años en el banquillo rojiblanco, el que fuera defensa responde desde el corazón. "Es buen amigo. El otro día estuve con Rafa Alkorta hablando en un 'podcast' y coincidíamos en que los que hemos sido compañeros de Ernesto nunca pensábamos que sería entrenador. Yo tuve la suerte de estar en la plantilla la primera vez que cogió el Athletic y ver la evolución que ha tenido es increíble. En la misma línea que Ancelotti. Sin quitarle a ninguno de los dos ningún mérito en el tema táctico, sí que es verdad que Ernesto, con esa tranquilidad que ha tenido en todos los sitios que ha estado, es el mismo que estuvo en Barcelona, Valencia, Villarreal, Olympiacos... hace que haya vuelto a sacar la gabarra después de 40 años", reconoce en una entrevista al diario Marca.
En cuanto a si ha merecido la pena esperar 40 años para volver a sacar la Gabarra por la ría de Bilbao, Karanka responde. "Por supuesto. Este título es muy importante para la gente del club y para la afición. También para los jugadores que están en la cantera, que, seguramente, no piense como pensábamos hace 25 años: 'Salgo del Athletic porque es complicado ganar un título'. Ahora se ha visto que el Athletic puede ganar. Ver la Gabarra y cómo estaba todo hace que se te caigan las lágrimas de la emoción y lo importante de cara a generaciones venideras".