Las cesiones acordadas en verano por el Athletic para el crecimiento de sus joyas de Lezama más allá de San Mamés no terminan de funcionar ni ofrecer el resultado esperado, con casos verdaderamente preocupantes que ya han obligado al club de Ibaigane a replantearse la situación y tomar medidas.
Recientemente, se expuso en ESTADIO Deportivo el caso de Nico Serrano, que este fin de semana dio un paso al frente en su cesión en el PEC Zwolle al aprovechar de los pocos minutos de los que dispone para firmar una acción extraordinaria. El extremo asistió en el 0-5 tras una magnífica arrancada que invita a pensar que, a partir de ahora, quizás disfrute de más minutos en la Eredivisie, si bien el Athletic no está dispuesto a esperar demasiado y se plantea sentarse con el club neerlandés en breve para poner sobre la mesa la posibilidad de romper la cesión y buscarle un nuevo destino en enero.
Más preocupa si cabe la situación de otra de las grandes esperanzas de Lezama y que, en este caso, sí tiene un recorrido considerable en el primer equipo, con 82 partidos a sus espaldas, si bien salió en verano después de que la temporada pasada ya descendiera su protagonismo a las órdenes de Valverde. Se trata de Unai Vencedor, un centrocampista de 22 años en el que sigue habiendo muchas esperanzas depositadas en Ibaigane, pero cuya cesión está resultando, contra pronóstico, un fiasco para los intereses del medio y del Athletic.
Hace alrededor de un mes, ya se apuntó en este diario que en San Mamés estaban decepcionados por la ausencia de continuidad del bilbaíno en Ipurua, cuando se esperaba totalmente lo contrario, pero es que, desde entonces, la situación ha empeorado considerablemente y se han encendido las alarmas ante el riesgo de que es estanque por completo la evolución de Vencedor.
En este sentido, el medio ha pasado de entrar en la recta final de los partidos a salir completamente de los planes de Joseba Etxebarria, hasta el punto de que en los dos últimos choques de los armeros, ante Levante en casa y Villarreal fuera, se quedó en el banquillo y no dispuso ni de un solo minuto. Este ostracismo en estos dos duelos refleja que no convence o no cuadra en los planes del preparador eibarrés y que tendrá muy complicado ganarse un puesto en el once. De hecho, hasta la fecha tan solo ha sido titular en tres partidos y ha disputado solo 411 minutos repartidos en 16 partidos.
Este giro hacia peor en la cesión de Unai Vencedor ha provocado que el Athletic ya analice el caso con detenimiento y, como en el caso de Nico Serrano, estudie seriamente tomar cartas en el asunto y mantener una conversación con los dirigentes del Eibar de cara a enero.