Fernando Mateos3 min lecturaEn lo que parecía ser una noche de fiesta en San Mamés, con la afición vibrando con la victoria de su equipo después de dos jornadas consecutivas sin vencer, en el minuto 68 saltaron todas las alarmas. Nico Williams se tiró al césped y la grada del coliseo bilbaíno enmudeció.
El futbolista más determinante del conjunto rojiblanco tuvo que ser sustituido por Muniain después de quedarse tendido unos segundos en los que se echó las manos al rostro, con evidentes gestos de dolor en su pierna derecha.
A cinco días del partido de ida de las semifinales de la Copa del Rey ante el Atlético de Madrid, el concurso del internacional español podría peligrar en una cita trascendental. Todas las miradas, por tanto, apuntan a las pruebas médicas a las que debe ser sometido para conocer el alcance exacto de esas molestias.
De confirmarse su ausencia en el Metropolitano, este próximo miércoles a partir de las 21:30 horas, se trataría sin duda de una baja de mucho peso para Ernesto Valverde, que no quiso correr el más mínimo riesgo y ordenó su cambio inmediato frente a los bermellones.
Cabe recordar que Nico Williams ya se perdió tres encuentros consecutivos de Liga en el mes de septiembre, por una lesión en el aductor, y tampoco fue de la partida en la primera eliminatoria de la Copa del Rey ante el Rubí.
Por si fuera poco, en el minuto 81, su hermano Iñaki se fue con una leve cojera y fue relevado por Adu Ares. En su caso, sin embargo, todo apunta a que su cambio fue por precaución. Decidió no forzar con el partido ya resuelto, pero su imagen en el banquillo junto a Nico no fue nada tranquilizadora.
Se pudo ver al mayor de los Williams con gestos de dolor y siendo atendido de una molestia en la planta de un pie, por lo que también se está a la espera de conocer el alcance de dicha dolencia.
De confirmarse los peores augurios, el partido ante el Mallorca podría suponer un peaje demasiado caro para un Athletic que ve peligrar la actuación de sus futbolistas clave en uno de los encuentros más importantes de la temporada.
Tras el partido, Yuri se mostraba esperanzado en que ambos puedan estar listos para la Copa del Rey. "Es cosa del desgaste, la temporada va avanzando e imagino que será el cansancio. Espero que no sea nada porque son dos jugadores muy importantes para nosotros”, afirmó.