Manuel Pedrero3 min lecturaEl Athletic Club de Bilbao comenzó LaLiga EA Sports este sábado con derrota. Los de Ernesto Valverde no pudieron superar al Real Madrid en San Mamés y acabaron perdiendo 0-2. Rodrygo y Jude Bellingham impidieron a los vascos rascar algo positivo en el estreno. Un estreno liguero que está dejando muchas anécdotas en la previa de los encuentros. Como novedad, este curso habrá cámaras en el interior de los vestuarios, algo inimaginable hace unos años. Curioso es lo que se vivió dentro del vestuario del equipo vizcaíno. Una espiritual forma de enfocar el choque antes de saltar al terreno de juego.
LaLiga se ha propuesto modernizar el campeonato introduciendo novedades en el desarrollo de los partidos. Esta temporada, los jugadores conceden entrevistas en el descanso y hay cámaras pendientes de los banquillos durante las ya famosas pausas de hidratación. Aunque una de las cosas que más llama la atención es la inclusión de cámaras en el interior de los vestuarios antes de que los jugadores salten al campo. Es significativo observar las arengas de los entrenadores y propios jugadores entre sí.
Resulta curioso lo que ayer se vio en el vestuario del Athletic Club. Toda la plantilla en corro comenzó a rezar antes de afrontar su partido ante el Real Madrid. Concretamente, la plantilla rojiblanca recitó la oración del 'Padrenuestro'. Posiblemente la oración cristiana por excelencia. Mejor verlo:
Todos al unísono comenzaron a orar: "Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal", recitaron.
Tras el rezo, los jugadores vizcaínos procedieron a la habitual arenga previa al encuentro. A pesar del rezo, el combinado vasco poco pudo hacer ante un Real Madrid muy superior que dominó el encuentro desde el comienzo. Rodrygo adelantó a los blancos antes de llegar a la media hora de juego y ocho minutos después sería el debutante Bellingham el encargado de ampliar distancias. Los de Valverde lo intentaron en la segunda parte sin conseguir el premio del gol en un partido que estuvo marcado por la desgraciada lesión de Éder Militao. El central brasileño de la entidad merengue se rompió el ligamento cruzado de la rodilla al inicio de la segunda mitad y dice adiós a la temporada prácticamente. Idéntica lesión a la de Courtois.