Ernesto Valverde tiene motivos para estar contento antes del parón de selecciones. El Athletic Club tiene una posición en la clasificación de LaLiga EA Sports bastante reconfortante, con 17 puntos que reflejan un buen comienzo de temporada. Sin embargo, el estado del terreno de juego de San Mamés es motivo de inquietud en la entidad bilbaína. A pesar de los resultados positivos en el campo, como la última victoria ante el Almería, la calidad del césped ha disminuido y preocupa a jugadores y directivos.
El césped de San Mamés, que solía ser un referente de calidad y buen mantenimiento, ha mostrado signos evidentes de deterioro. En varias zonas del campo, la hierba se encuentra en mal estado, y desde una vista cenital, se puede apreciar que hay áreas donde la cobertura de césped es escasa. Esto representa un problema tanto estético como funcional, ya que el mal estado del campo puede afectar el rendimiento de los jugadores y aumentar el riesgo de lesiones.
La preocupación por el césped es tan seria que recientemente se llevó a cabo una reunión en el estadio, según Marca, en la que participaron el encargado de mantenimiento del césped del club, así como representantes de la operatividad de San Mamés y ejecutivos del Athletic Club. Esta reunión evidencia la urgencia de abordar el problema y encontrar soluciones efectivas para restaurar la calidad del terreno de juego.
Una de las razones que se han identificado como causa del deterioro del césped es la falta de luz natural en San Mamés. El estadio cuenta con iluminación artificial para los partidos que se juegan en horarios nocturnos o con poca luz natural, pero esta luz artificial no es suficiente para mantener el césped en óptimas condiciones. Además, el hecho de que el campo tenga que reponerse a las altas temperaturas y a la falta de lluvia en los meses anteriores ha contribuido al problema.
A medida que avanza la temporada y el clima se vuelve más frío y húmedo, se espera que las condiciones del campo cambien. Sin embargo, esto no significa que el problema del césped se solucione automáticamente. El Athletic Club está obligado a tomar medidas inmediatas para asegurarse de que San Mamés vuelva a tener un césped de alta calidad que esté a la altura de las expectativas y garantice la seguridad de los jugadores.
El próximo partido en casa contra el Valencia, programado para el 29 de octubre, será un nuevo desafío para el terreno de juego de San Mamés. A medida que se acerca esa fecha, el club deberá trabajar diligentemente para mejorar las condiciones del césped y garantizar que el estadio esté en las mejores condiciones posibles para el partido. La calidad del campo es esencial para el desarrollo del juego y la seguridad de los jugadores, y el Athletic Club no puede permitirse descuidar este aspecto fundamental de su estadio.