El Athletic Club de Bilbao se enfrenta a un desafío importante en los próximos meses. Hasta siete jugadores acaban su contrato en 2025. Con la nueva temporada a la vuelta de la esquina, la directiva deberá estudiar detalladamente cada uno de estos casos.
El veterano Óscar de Marcos, quien ha renovado contrato temporada tras temporada, es uno de los casos más importantes. Su continuidad depende en gran medida de su estado físico y de las sensaciones que él mismo tenga. A sus 34 años, De Marcos sigue siendo una pieza fundamental en el esquema del Ernesto Valverde, aportando experiencia y liderazgo dentro y fuera del campo.
Ander Herrera también ha renovado recientemente su contrato, pero su rendimiento ha estado condicionado por las lesiones. El centrocampista no está rindiendo como se esperaba en esta segunda etapa en el Athletic, pero tanto el jugador como el técnico Ernesto Valverde esperan que pueda recuperar su mejor forma la próxima temporada.
El caso de Yuri Berchiche es diferente, ya que su contrato incluye una opción para extenderlo por una temporada más. El lateral izquierdo ha sido un jugador clave para Valverde y su posible renovación depende tanto de su rendimiento como de la voluntad del club de hacer efectiva esta opción.
El lateral, uno de los capitanes y hombre de confianza dentro del club, viene de una de sus mejores temporadas. Su calidad y exeriencia hacen de él en un jugador valioso. La renovación de su contrato dependerá de cómo se encuentre.
Galarreta, fichado el verano pasado, firmó por dos temporadas y ha mostrado un gran rendimiento en el centro del campo. Se espera que continúe siendo una pieza clave en el equipo, y su renovación parece ser una cuestión de tiempo.
Villalibre renovó su contrato hace un año, pero ha visto como este curso no ha contado mucho para el ‘Txingurri’ Valverde. La competencia en la delantera, con jugadores como Guruzeta y Nico Williams, y el fichaje de hombres Álvaro Djaló ponen en duda su continuidad. La salida de Raúl García y la incógnita sobre el futuro de otros delanteros también complican su situación.
Imanol, otro de las jóvenes promesas de Lezama, también termina contrato en 2025. Sin embargo, su situación parece orientarse más hacia una posible cesión en busca de minutos. Esta estrategia podría beneficiarle a largo plazo, permitiéndole regresar al Athletic con bastante más experiencia.
El presidente Jon Uriarte y su equipo tienen un mucho trabajo por delante. Además de las renovaciones, también deben negociar con el entrenador Ernesto Valverde, quien prefiere firmar contratos cortos y renovar de año en año. La continuidad de Valverde es fundamental para la estabilidad del equipo.
La situación de estos siete jugadores no solo afecta al presente del Athletic, sino que también marcará el futuro del equipo. La próxima temporada será, por tanto, crucial para definir el rumbo del club.