Íñigo Ruiz de Galarreta ha comparecido en la previa del choque que el Athletic Club debe disputar ante el Slavia en la UEFA Europa League. El centrocampista, pieza clave para Ernesto Valverde, ha conseguido, con el paso del tiempo, convertirse en alguien imprescindible para el conjunto que suele disputar sus encuentros en San Mamés. A pesar de haber sufrido algunos problemas con las lesiones, Galarreta ha evidenciado que es una pieza esencial para el engranaje de la escuadra rojiblanca, que aspira a dar un notable paso hacia delante en uno de los torneos más exigentes del Viejo Continente.
Cuestionado acerca de cuál podría ser la mejor cuenta para el Athletic, que solo piensa en seguir sumando de tres en tres, Ruiz de Galarreta ha sido claro. "No echamos cuentas porque nuestra mejor cuenta es ganar en San Mamés. Son sólo tres jornadas y hasta la sexta o séptima no podremos ver hasta dónde podemos pelear. Europa es muy exigente y complicada. Nos viene un rival en un momento espectacular y va a ser complicado. En casa tenemos que hacernos muy fuertes", analizó.
Galarreta, realista, es consciente de que el Athletic puede hacer soñar a sus aficionados, pero no debe despistarse, ya que cualquier fallo de concentración puede ser fatal para la escuadra vizcaína. “Es emocionante e ilusionante. Aspiramos a competir y a que San Mamés viva un día grande. Ya he dicho antes que serán los partidos los que digan los objetivos”. Asimismo, ha querido hablar de lo que significa para él regresar al Viejo Continente. No hay que olvidar que, aunque de forma breve, pudo saber lo que es jugar en Europa ya que lo hizo de la mano de Marcelo Bielsa. “La experiencia es relativa porque lo hice muy joven. Mi experiencia es en el fútbol y es desde ahí en lo que intento ayudar”.
Desde su punto de vista, Galarreta quiso elogiar la figura de Jauregizar “por su dinamismo, energía y capacidad”. No se quedó ahí, ya que tuvo también buenas palabras hacia los atacantes de su equipo. "Son muy determinantes y es una pasada. Queremos dar dinamismo desde el centro del campo, pero abrir a banda y que nuestros jugadores desequilibren como lo hacen es una suerte que tenemos".