En Bilbao no van de farol. Lo que empezó como un pequeño rumor que sonaba entre bambalinas ha terminado por ser el objetivo número uno del presente mercado de fichajes. Con la salida de Iñigo Martinez y la 'presión' de Ernesto Valverde por incorporar una pieza de primer nivel para la zaga, el Athletic Club está dispuesto a poner todo lo que esté en su mano para lograr el fichaje de Aymeric Laporte, a quien han ido 'rodeando' desde hace semanas.
Así es. Aunque en la dirección deportiva de los vascos siempre han tenido claro que se trata de una operación que se debe cocinar a fuego lento, saben que de igual modo llegará el día en el que deban ir con todo y para ello deben estar preparados.
Si bien saben que necesitarán hacer un gran esfuerzo económico –algo a lo que están dispuestos–, también han entendido desde el principio que el factor emocional puede ser el que decante la balanza a su favor ante el nivel de los otros postores, ya que muchos serán equipos de Champions League, mientras ellos ni siquiera disputarán competición europea.
Ante tal escenario, los de Vizkaya quieren hacer valer la intención del internacional español, quien estaría deseando volver a territorio nacional y, en esa línea, ve cada vez con mejores ojos la opción del Athletic –la del FC Barcelona voló–. Entrando por esa puerta, la sentimental, quieren convencerle de que sería una pieza esencial del proyecto y que con él se podrán alcanzar altas cotas. Es el primer paso antes de superar el mayor obstáculo: hacer una oferta que cumpla con las exigencias del Manchester City.
Sobre eso último, es el periodista Simon Mullock de Sunday Mirror quien arroja algo de luz al señalar que el fichaje de Josko Gvardiol por parte de los sky blue ha abierto definitivamente la puerta a Laporte, por quien el City pretende alcanzar una venta que ronde los 30 millones de libras; es decir, unos 34,7 millones de euros.
Con el precio fijado, en Bilbao ya saben lo que deben poner sobre la mesa para batir en la carrera a colosos ingleses como Arsenal, Tottenham Hotspur y Aston Villa (también están interesados). Sin embargo, puede que los vascos logren una rebaja a tenor de que el deseo del City no es solo ingresar dinero, sino que Laporte no acabe en un rival de la Premier League. Siendo así las cosas, no extrañaría que el conjunto inglés diera ciertas facilidades al Athletic.
Con razones de sobra para ser optimistas, los de San Mamés están dispuestos a esperar hasta el último momento para poder hacerse con su gran deseo; tanto es así que otras opciones, como la de David García (Osasuna), han quedado totalmente apartadas a la espera de que se resuelva el futuro del francés.