El Athletic Club de Bilbao no es solo uno de los equipos más clásicos y respetados de nuestro fútbol, sino una institución deportiva única en el mundo. Según un reciente estudio realizado por el Centro Internacional de Estudios del Deporte (CIES), el conjunto vizcaíno es el único equipo de todo el planeta con una plantilla compuesta en su totalidad por jugadores nacionales, un hecho que refuerza su filosofía, basada en la contratación de jugadores nacidos o formados en el País Vasco, Navarra y el conocido como País Vasco-francés.
Este estudio analiza el "anclaje territorial" de casi 1.000 equipos de fútbol repartidos en 58 ligas de todo el planeta, situándose los bilbaínos en una posición que ningún otro equipo consigue igualar: un 100% de jugadores nacidos en la región o formados en la cantera del club.
Cerca del Athletic Club, se encuentra el Envigado de Colombia, que ocupa la segunda posición del ranking con un 97,6% de jugadores locales. A él les siguen otros equipos destacados como el Esgrima de La Plata en Argentina y el Chivas de Guadalajara en México, ambos con un 92,3% futbolistas nacionales en su plantilla.
El informe del CIES aporta también otros datos interesantes sobre la composición de los equipos en las cinco grandes ligas europeas. Así se muestra la singularidad no solo del Athletic sino de otros equipos de la zona como Osasuna y Real Sociedad. El conjunto navarro es el segundo de nuestro país con mayor número de jugadores locales con 76,3%, seguido muy de cerca por la escuadra txuri-urdin con un 74,1%. Estos datos ponen de manifiesto la apuesta de los equipos vascos y navarros por la cantera y la promoción de futbolistas autóctonos.
Apostar por jugadores locales aporta grandes beneficios al club y la provincia a la que éste pertenece, ya que permite a los aficionados identificarse de una manera más intensa con el equipo y los jugadores, al tiempo que alinea al club con los valores culturales de su entorno y potencia el desarrollo del fútbol base en la región.
El modelo del Athletic Club de Bilbao no solo ha resultado ser un éxito en la formación de jugadores, sino que ha demostrado que es posible competir contra los equipos más poderosos del mundo como Barcelona, Real Madrid o Atlético. Esta política deportiva es un elemento clave en la economía rojiblanca ya que se mantiene el núcleo de jugadores principal durante varios años y no hace falta realizar grandes desembolsos para fichar jugadores, sobre todo extranjeros, ya que no tienen cabida.