Álex Martín4 min lecturaEl Athletic Club se encuentra velando armas para sus próximos compromisos, entre los que destaca el derbi ante la Real Sociedad, el cual ha estado en el punto de mira las últimas semanas debido al conflicto que tiene abierto el conjunto dirigido por Imanol Alguacil con la RFEF por su encuentro de la Copa del Rey ante el Jove Español. Los de Ernesto Valverde, que ya dejaron claro que no iban a permitir que se moviera el enfrentamiento ante los donostiarras, han impuesto su ley y no han dejado que se les perjudicase. Ahora, quieren aprovecharse de una buena racha de lo más particular y que tiene como protagonista a la detención de las competiciones por la llamada de los combinados nacionales.
No en vano, tal y como apunta Marca, el Athletic, en los dos parones que se han llevado a cabo esta temporada, ha sabido exprimir a la perfección sus oportunidades. El primero, en septiembre, cuando se vieron las caras con la UD Las Palmas. No fue un partido fácil para los de Valverde, ya que, tras haberse adelantado con dos tantos de Sancet y Nico Williams durante la primera media hora, la escuadra isleña fue capaz de volver a meterse de lleno en el duelo. Sin embargo, no dejaron que el empuje local les influyera y se terminaron llevando el triunfo con un resultado de dos goles a tres.
Ya en octubre, la situación fue la misma, pero, a la vez, ligeramente distinta, ya que no pasaron tantos apuros para hacerse con los tres puntos. En esta ocasión, el Athletic se vio las caras con el Espanyol, que quería dar la sorpresa en el estadio de San Mamés. Sin embargo, los rojiblancos, que no estaban dispuestos a que los pericos les aguaran la fiesta, se mostraron de lo más contundentes. Liderados por un excelso Iñaki Williams, en apenas media hora, ya vencían por tres goles a cero a los de la Ciudad Condal. En este partido, consiguieron dar un notable golpe de efecto en LaLiga EA Sports, ya que vencieron por 4-1 y sumaron un triunfo fundamental para mantenerse en la lucha por la Champions.
Viendo los precedentes, no es de extrañar que el Athletic sea considerado como favorito para el duelo ante la Real Sociedad, que se fue al parón después de ganar de forma solvente al FC Barcelona y con grandes sensaciones. Conscientes del potencial ofensivo que tienen los de Imanol Alguacil, de los que están separados por apenas dos puntos en el campeonato de la regularidad, los rojiblancos afrontan este partido como un antes y un después en un torneo cada vez más exigente.
Conscientes de que, si consiguen los tres puntos la próxima semana, pueden apretar la lucha por la antigua Copa de Europa, los ‘leones’ están dispuestos, como siempre, a dejárselo todo sobre el terreno de juego. De cara a un partido clave en su camino en el campeonato doméstico, el Athletic quiere demostrar, una jornada más, de lo que es capaz, y más, delante de su afición. Esperan que San Mamés se convierta en una olla a presión y que les pueda llevar en volandas hacia la victoria ante su eterno rival en el País Vasco.