El Athletic Club hunde sus raíces en Gran Bretaña. Su origen, su nombre, sus colores… Esa relación histórica ha llevado a muchos británicos a formar parte del club vasco, como es el caso del fallecido Howard Kendall, quien fuese leyenda del Everton y entrenador rojiblanco a finales de los ochenta.
Gracias a él, hoy día la relación entre el Athletic e Inglaterra sigue más viva que nunca. Porque de su paso por San Mamés nace, de algún modo, el Stocky Bilbao, una escuela de fútbol que alberga a un centenar de niños y niñas que esta pasada semana han vivido un momento muy especial en Liverpool.
Hasta allí se ha desplazado un conjunto de la cantera bilbaína para participar en el torneo sub 21 Premier League International Cup. Un equipo abanderado por Elijah Gift, que llegó a Lezama el pasado verano procedente precisamente del Liverpool, tras nacer en Navarra y criarse en Inglaterra.
Junto a él, los aficionados rojiblancos se sorprendieron al ver en las redes sociales las fotografías de un nutrido grupo de pequeños aficionados del Athletic, ataviados con sus camisetas rojiblancas, que no dudaron en aprovechar la ocasión para apoyar a los jóvenes cachorros que se enfrentaban al Everton.
El precursor de este modesto equipo de cantera de Liverpool es Stephen Lally, a su vez aficionado del Everton, que según cuenta Relevo se hizo también seguidor de los ‘leones’ tras el paso de Kendall por el banquillo de la ‘Catedral’, lo que años después de la ha llevado a fundar un equipo que ronde homenaje a la entidad vasca.
"Yo crecí siendo fanático del Everton y siempre he seguido el fútbol español con un ojo puesto en Bilbao. Me atrajo porque encontré muchas similitudes entre ellos y el Everton. Siempre me ha parecido fascinante que ambos sean miembros fundadores de sus ligas de fútbol. Es fácil seguir al Real Madrid o al Barça, como me hubiera sido fácil seguir al Liverpool, pero hay algo que siempre ha encendido una llama en mí, creo que significa mucho más para Everton o el Athletic ganar cosas", ha asegurado Lally en el citado medio.
Lo curioso, además, es que esa pasión por el Athletic se transmite de padres a hijos, y eso fue realmente lo que le llevó a crear este equipo. "Mi hijo sufría un poco de ansiedad social y no quería entrar en otro equipo. Fundé el Stocky y desde entonces su confianza ha ido creciendo enormemente junto con el club. Creo que les ha brindado a los niños de la comunidad la oportunidad de enamorarse del fútbol en un entorno increíble que les permite prosperar", explica.
Actualmente, dicho club de cantera tiene equipos en las categorías sub 8, sub 7, sub 6 y sub 5, todos ellos con su camiseta rojiblanca y un escudo muy parecido al original del Athletic, con un grito que les hace inconfundibles cada fin de semana: "¡Up the Bilbao!".
Por todo ello, la presencia de una representación del club vasco en Liverpool ha sido un regalo para ellos. "A los niños que asistieron les encantó y los jugadores y el personal del Athletic estuvieron brillantes con los chicos y les han regalado recuerdos para toda la vida", apunta su fundado, que ahora sueña con poder a traer a su escuela a Bilbao en alguna ocasión para que se empapen más de cerca aún del sentimiento rojiblanco.