Desde que se consiguiera la Copa del Rey el pasado 6 de abril en La Cartuja, el futuro de la plantilla del Athletic Club se ha ido perfilando poco a poco. Los dos primeros en comunicar que no seguirán el próximo año han sido Raúl García, que se retira, e Iker Muniain, que tras toda una vida en Bilbao quiere probar una aventura nueva fuera de España. También se ha por hecha ya la marcha de Óscar de Marcos y habrá que ver que pasa con otros hombres como Álex Berenger, Asier Villalibre o Adu Ares...
El joven canterano del Athletic Club de Bilbao tuvo una rápida irrupción en el equipo de Ernesto Valverde, debutando la pasada temporada con el primer equipo en la primera jornada de LaLiga frente al Mallorca, pero se pasó casi todo el año jugando en Primera Federación con el Bilbao Athletic. Pero esta temporada era fundamental sobre todo porque afrontaba su último año de contrato. Finalmente Adu Ares acabó renovando poco antes de Navidad por tres años más, hasta 2027, poniendo así fin a los rumores de una posible salida y pasando a ser jugador de la primera plantilla.
Pero el futbolista de 22 años no ha tenido la progresión que se le presuponía esta temporada, en buena medida también por la fuerte competencia que hay en su puesto con hombres como Nico Williams o Álex Berenguer. Esto ha provocado que el bilbaíno tan solo haya podido disputar 15 partidos, tan sólo diez de ellos en LaLiga en los que ni ha llegado a los 200 minutos (181').
Por ello, en los despachos de Ibaigane tendrán que tomar una importancia decisión de futuro con Adu Ares. Hay muchísimas esperanzas puestas en el joven extremo y el hecho de que la próxima temporada el Athletic vaya a competir en Europa y necesitará más fondo de armario, puede ser clave para verle mucho más, aunque también es cierto que vendrá un jugador como Álvaro Djaló para jugar en esa banda, quien precisamente es primo de Ares.
Así, tampoco se descartaría una salida en forma de cesión para que no cortar la progresión del futbolista. Tan sólo ha participado en dos de los últimos nueve partidos de LaLiga, apenas 46 minutos. No ha jugado un sólo minuto en el mes de abril y no es algo que pueda permitirse el club rojiblanco.
Quizás ahora, con el objetivo de la Champions ya casi descartado y la quinta plaza prácticamente amarrada, sea el momento de verlo más, un escaparate para quién sabe si terminar de convencer a Valverde de que debe tener más protagonismo la próxima temporada o para que algún club llama a la puerta del Athletic para pedirle sus servicios.