Acostumbrado a jugar ante más de 50.000 personas, pues no ha bajado de esa entrada el Benito Villamarín lo que llevamos de temporada, hacerlo ante un 60% menos puede parecer insignificante, pero el ambiente que le espera al Real Betis este próximo domingo en Mendizorroza no es el que le gusta tener a nadie cuando juega de visitante.
La afición del equipo babazorro aprieta, su campo es pequeño, pero muy recogido y en el que se nota la presión de sus casi 20.000 espectadores y este fin de semana va a estar lleno. Ya lo estuvo en el duelo ante Osasuna, en el que el Alavés fue mejor y el equipo navarro más efectivo. Y el público no dejó de apretar pese a ir perdiendo desde el último tramo de la primera mitad. Y el Sevilla ya lo sufrió en el partido del regreso a Primera del Alavés en casa, donde acabaron cayendo por 4-3.
El Alavés se hacía eco de lo que le espera al Betis en su página web:
"El Deportivo Alavés recibirá al Real Betis Balompié este domingo (Mendizorrotza, 18:30 horas) con el estadio albiazul convertido, de nuevo, en una caldera de pasión.
El templo babazorro albergará una entrada superior a los 18.000 espectadores, según cifras de entradas adquiridas hasta la fecha. El bloque de Luis García Plaza peleará por el triunfo al calor de su afición, otra vez en Mendi, ante el conjunto verdiblanco, tan solo una semana después de recibir a Osasuna en idéntico escenario.
El aforo esperado para el encuentro confirma una vez más el compromiso y el apoyo incondicional de la hinchada alavesista con su equipo".
Ante Osasuna reunieron a 19.035 espectadores, contra el Athletic fueron 19.421, ante el Valencia 16.641 y 15.308 frente al Sevilla, un partido que se jugó en lunes. Si tenemos en cuenta que el aforo de Mendizorroza es de 19.840 personas, en los últimos duelos se roza el lleno y, ante el Betis, esto volverá a ocurrir.
El equipo verdiblanco, hasta ahora, ha logrado un triunfo (Villarreal), un empate (Granada) y dos derrotas (Barça y Athletic) en sus salidas, pero no gana desde la primera jornada. Deberá sobreponerse al ambiente que le espera y al cansancio que arrastrará del partido de mañana de la Europa League para seguir sumando.